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Vecinos y comercios, irritados por cierre de tramo de Masaryk


 
Miriam de Regil

Este lunes arrancaron formalmente las obras de rehabilitación de la avenida Presidente Masaryk, en Polanco, la de mayor valor comercial del país.
 
El gobierno de la Ciudad, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), anunció que en una primera etapa (hasta el 16 marzo) Masaryk permanecerá cerrado a la circulación, entre Moliere y Lafontaine en dirección hacia Periférico, aunque posteriormente se ampliará desde Arquímedes.
 
En este tramo, se laborará desde ahora en el levantamiento de banquetas.
 
Pese a que las autoridades capitalinas explicaron que el inicio de las obras de este importante corredor urbano no afectaría la actividad de colonos, comerciantes y peatones, EL FINANCIERO palpó las molestias entre los vecinos de la zona.
 
"La semana pasada sólo nos entregaron una circular que anunciaba del inicio de los trabajos, pero nada más; lo que sabemos es por las noticias", señaló una trabajadora de la tienda de ropa infantil Pili Carrera.
 
Asimismo apuntó que como no hay lugar para estacionarse, ayer la clientela ni se paró por la tienda que por lo regular recibe entre 15 y 20 personas al día.
 
Jorge Alcalá, gerente de High Life, explicó que el jueves pasado hubo una reunión de vecinos, comerciantes y autoridades para hablar del tema.
 
"La cita fue en el Conservatorio y allí se nos dijo que no habría problemas y que el proyecto sería muy rápido gracias a la ayuda de todos, pero los vecinos, quienes no tienen un negocio son los que en su mayoría están inconformes con el pago que deberán hacer".
 
No abrió el módulo
 
Aunque el gobierno capitalino anunció un módulo para información y quejas, en la esquina de Masaryk y Alejandro Dumas, hasta ayer no estaba instalado.
 
Clara Urrutia, vecina de la zona, aseguró estar molesta no sólo por el tráfico, el polvo y el ruido, sino por el proyecto en general; pues sí bien mejorará la zona, favorecerá más a las grandes firmas que tienen un negocio en Masaryk.
 
"Tener que pagar nosotros una cantidad no es justo; pues sí bien vivimos aquí, pagamos impuestos ya, y el gobierno debe ser quien destine los recursos de todas las obras públicas".
 
Las obras tendrán una duración aproximada de 18 meses y prevén la sustitución de 60 mil metros cuadrados de pavimentos por concreto hidráulico en áreas de rodamiento vehicular, la rehabilitación de 53 mil metros cuadrados de banquetas accesibles, libres de obstáculos y de accesibilidad universal, y la incorporación de 330 luminarias peatonales y vehiculares.
 
Asimismo, el saneamiento vegetal de más de 20 mil metros cuadrados de áreas verdes y la incorporación de casi 200 nuevos árboles en el corredor.
 
El proyecto contempla las instalaciones, equipos, transformadores y cableado para la canalización subterránea de líneas eléctricas y de comunicación, proyecto que se trabaja en conjunto con la Comisión Federal de Electricidad y empresas cableras.
 
Eduardo Aguilar Valdez, coordinador de la Autoridad del Espacio Público (AEP), acotó que con la rehabilitación del corredor Presidente Masaryk se aumentará todavía más la plusvalía de la zona.
 
"El diseño está a cargo del arquitecto Bernardo Gómez Pimienta y contempla la intervención de 135 mil metros cuadrados en una longitud de 3.1 kilómetros que va desde Periférico hasta Mariano Escobedo," apuntó.
 
El costo de dicho proyecto será de 480 millones de pesos, cantidad que se invertirá mediante un esquema de contribución de mejoras previsto en el Código Fiscal.
 
Los vecinos y comerciantes de la avenida pagarán la mitad del costo de la rehabilitación.
 
El GDF prevé que los dos mil 700 contribuyentes registrados en la zona deberán pagar en promedio entre 500 y hasta 40 mil pesos. Esta cantidad será solicitada una vez que termine la obra (julio de 2015) por la Secretaria de Finanzas, que enviará las boletas de pago a los involucrados para que éstos puedan hacer los depósitos.
 

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