Axel Sánchez / Bloomberg
Hyundai, el mayor fabricante surcoreano de automóviles, afina su estrategia de crecimiento en México, la cual considera un contrato de exclusividad con distribuidores nacionales y la posible instalación de una planta de producción de automóviles.
Fuentes con conocimiento del proyecto dijeron que Hyundai ya negocia con agencias de automotores para iniciar, en una primera fase, la venta de sus autos en las tres principales ciudades del país: Distrito Federal, Monterrey y Guadalajara.
También espera que el gobierno de México le otorgue un cupo arancelario para importar más unidades desde Corea del Sur e iniciar así su incursión en solitario, pues el próximo año vencerá su acuerdo de comercialización con Chrysler de México.
Un alto funcionario de la Secretaría de Economía confirmó que la armadora podría estar instalando una planta en el país el próximo año, principalmente para abastecer los mercados de México y Sudamérica.
Ildefonso Guajardo, titular de la dependencia, dijo recientemente que la producción automotriz de México podría recibir un nuevo impulso, pues están en pláticas con Hyundai y la firma alemana BMW para edificar fábricas en el país.
El año pasado, la compañía anunció una inversión de 131 millones de dólares para la construcción de una planta de autopartes hechas con aluminio en Baja California, la cual iniciará operaciones en 2014.
En estas instalaciones prevén una producción anual de 900 mil piezas, entre las que se encuentran monobloques, cabezas de motores y cajas de transmisión automática, algunas de ellas serán exportadas a Estados Unidos.
Oscar Albin, presidente de la Industria Nacional de Autopartes, dijo a EL FINANCIERO Televisión que la llegada de Hyundai al país podrá incrementar el número de empresas coreanas que se dedican a maquilar piezas de auto, “pues hay muy pocas en México”.
A nivel mundial, la firma asiática vendió el año pasado 4 millones 401 mil 947 vehículos, lo que representó un crecimiento de 8.6 por ciento respecto de los 4 millones 51 mil 716 unidades reportados en 2011.
La empresa tenía un convenio de comercialización con Chrysler de México para vender sus unidades en el país, pero el próximo año vencerá.