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Shakhtar Donetsk triunfa con su fórmula brasileña

Antes de negociar a sus actuales figuras brasileñas como Alex Teixeira, Ilsinho, Marlos (al que compró en 4 millones de euros al Metalist y hoy vale el doble), el gran pendiente del equipo ucraniano es meterse a la historia de la Champions League por la puerta grande.

Después de ganar la Europa League en 2009, el Shakhtar Donetsk empezó a llamar la atención. El equipo ucraniano que fue fundado en 1936 como parte de los 27 clubes que integraban el futbol soviético fue de los pocos del bloque del Este que logró incursionar con éxito en los torneos de la UEFA.

A ritmo de samba, el conjunto fundado por mineros de pronto encontró la fórmula para acumular capital gracias a su buena visión para contratar jugadores brasileños. Su propietario, Rinat Akhmetov, uno de los hombres más acaudalados de Ucrania, inició un ambicioso proyecto en 2004 que ahora lo tiene encumbrado como uno de los equipos animadores de la Liga de Campeones de Europa.

En la temporada anterior de la Champions League, el Shakhtar logró avanzar a los octavos de final. Previamente, en la temporada 2010-11 alcanzó los cuartos de final.

La situación pinta mejor para este 2015, después de que el club arrancara los playoffs con un triunfo de 1-0 en su visita al Rapid Viena y hoy tendrá la oportunidad de conseguir su pase a la fase de grupos con sólo concretar un empate en casa.

Nada mal para un equipo cuyos jugadores tienen un valor total de mercado de 98.3 millones de euros. Según el portal especializado Transfermarkt, el delantero Alex Teixeira es su posesión más valiosa, con un costo de venta de 16.1 millones de euros. En su plantel se encuentran inscritos nueve brasileños, un argentino, dos croatas y 16 ucranianos.

Además de comprar barato y vender caro a sus futbolistas, la otra clave de su éxito es la continuidad de su técnico rumano Mircea Lucescu, quien dirige al equipo desde la temporada 2004. Sergei Palkin es el director deportivo, quien apoya el trabajo de Lucescu detectando el talento sudamericano.

En 2002 llegó el primer brasileño al equipo ucraniano, Brandao, y el bloque se extendió a ocho sudamericanos que decidieron aventurarse a un país desconocido a cambio de buenos sueldos. En la temporada 2010 hicieron fichajes fuertes: Willian llegó por un costo moderadamente alto (14 millones de euros) y el mexicano Nery Castillo (15 mde).

Willian fue comprado por Chelsea y Castillo resultó una decepción. Por ello, el Shakhtar se enfocó básicamente al mercado brasileño. Luiz Adriano es su máximo artillero en competencias de la UEFA con 32 goles, pero en años recientes también pasaron por sus filas jugadores que después se cotizaron como Douglas Costa (pasó al Bayern Munich), Fernandinho (ahora con Manchester City) y Eduardo Da Silva (Inter).

Antes de negociar a sus actuales figuras brasileñas como Alex Teixeira, Ilsinho, Marlos (al que compró en cuatro millones de euros al Metalist y hoy vale el doble), el gran pendiente del Shakhtar Donetsk es meterse a la historia de la Champions League por la puerta grande.

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