After Office

Triunfo de los Cubs no tiene precio; la última pelota sí

La bola con la que el equipo de Chicago consiguió el último out para ganar la Serie Mundial a los Indians sería una de las más caras de la historia.

La primera base de los Chicago Cubs, Anthony Rizzo, acababa de lograr el último out de la Serie Mundial, poniendo fin al más largo ayuno de campeonatos ganados en los deportes de ligas profesionales de Estados Unidos.

Pero antes de chocar los cinco con cualquiera de sus compañeros de equipo, Rizzo se ocupó de los negocios: llevó su mano izquierda hacia atrás y guardó la pelota en el bolsillo trasero del pantalón.

El valor de la pelota va mucho más allá de sentimentalismos. Podría recaudar más de 3 millones de dólares si se vendiera, dijo Ken Goldin, fundador de Goldin Auctions en Nueva Jersey, quien le puso un precio base de cerca de 1 millón.

"Sería una de las pelotas de beisbol más codiciadas de los tiempos modernos", dijo.

El valor de la pelota sería impulsado por dos cosas, dijo Goldin: los 108 años que pasaron sin que el equipo saliera victorioso en un campeonato y la cantidad de acaudalados fans de los Cubs que estarían dispuestos a desembolsar lo que fuera por poseerla.

Goldin dijo que duda de que la pelota se venda alguna vez.

El portavoz de los Cubs, Peter Chase, no respondió a una pregunta sobre si el equipo estaba en posesión de la pelota con la cual se obtuvo la victoria.

Ésta, de acuerdo con el protocolo de las Grandes Ligas, probablemente fue autenticada con un holograma después del partido.

Históricamente, para los grandes eventos como la Serie Mundial, la propiedad de artículos como las pelotas usadas en los partidos corresponde a la Liga Mayor de Beisbol, que luego decide qué hacer con cada ítem en particular. Los equipos y las organizaciones de caridad suelen pedir artículos.

La pelota del histórico jonrón 70 de Mark McGwire se vendió en subasta por una cifra sin precedente de 3 millones de dólares, incluida la comisión, en 1999 al coleccionista Todd McFarlane.

También lee: