Era 1969 cuando Gary Lineker asistió a su primera final. Tenía 8 años. Era el partido por el título de la Copa FA, recordó en una carta escrita para The Guardian en marzo pasado, entre Manchester City y Leicester City, este último equipo del que era aficionado. El niño, acompañado por su padre y su abuelo, regresó llorando a casa. Los Foxes perdieron 1-0.
Once años más tarde Lineker debutó con el Leicester. El delantero estuvo seis temporadas con el equipo (1979-1985), marcó 103 goles y se convirtió en el sexto mejor goleador del conjunto del centro de Inglaterra. Pero sus anotaciones fueron insuficientes para cambiar la historia del club, debido a que en su estancia sufrió un descenso, jugó tres campañas en la segunda división del futbol inglés y tres en la máxima categoría, donde el equipo no pasó del lugar 15 de la tabla general.
Los éxitos no sólo fueron escasos en la etapa de Lineker. La historia del Leicester City sigue sin contar con títulos de la Copa FA ni de la Premier League. Ha disputado más temporadas en la segunda división (61) que en el máximo circuito (53).
De acuerdo a la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, por sus siglas en inglés) de Reino Unido, la ciudad de Leicester es el decimotercer asentamiento con más habitantes (330 mil). Entre la diversidad de sus ciudadanos se encuentran japoneses, ugandeses, argelinos y nigerianos, quienes arribaron como refugiados después de la Segunda Guerra Mundial o de conflictos bélicos dentro de esos países. Coincide que dentro de la plantilla actual cuentan con el japonés Shinji Okazaki y el argelino Riyad Mahrez, quienes representan estas minorías culturales.
Los Foxes ignoran su historia en la presente campaña y hoy podrían festejar su primer campeonato de liga si el Tottenham no derrota al Chelsea. Los integrantes de la plantilla no son los mejores pagados de la Premier League, al contrario, en su mayoría son futbolistas cuyo valor de mercado, según el portal Transfermarkt, es menor al de los integrantes de los grandes equipos de Inglaterra. Un ejemplo es el delantero, quien está valorado en 12 millones de euros, una quinta parte que Sergio Agüero, atacante del Manchester City (60 mde).
"No creo que haya deseado algo más en mi vida deportiva que el Leicester se corone. Soy completamente feliz observando el deleite de mis tres hijos cuando ven los juegos del equipo porque lo sienten. Incluso mi hijo mayor, George, un fan del Manchester United de toda la vida, se entusiasmó con la actuación del Leicester. Veo la ilusión en toda la gente que asiste al estadio y también en las personas que viajan a apoyar cuando el equipo juega de visitante. Mi padre también se sumó y dijo que 'esperó toda su maldita vida para ver esto'", relató Lineker en la misiva.
A excepción del equipo de futbol de Leicester, la ciudad cuenta con campeones de liga en los otros tres deportes profesionales que se practican en ésta. Los Tigres de rugby han ganado 10 campeonatos; los Riders, de basquetbol, han conquistado tres títulos, y el Leicestershire County, equipo de cricket, se ha coronado tres veces. Ahora, ya sea hoy o en las dos fechas que restan del torneo, sus habitantes esperan que el Leicester City se convierta en el campeón número 24 del futbol inglés.