After Office

Gran Premio de Brasil, en la incertidumbre

Con la venta del circuito Interlagos, donde la Fórmula Uno tiene contrato, ésta se encuentra en riesgo debido a que funcionarios de Sao Paulo argumentan que la propiedad podría ser más rentable con su privatización.

El futuro a largo plazo del Gran Premio de Brasil está en el aire.

El circuito Interlagos será vendido a inicios del año próximo. Y pese a que Fórmula Uno tiene un contrato que vence en 2020, nadie parece saber qué sucederá a partir de ahí.

"El contrato será respetado por ser una obligación de quienquiera que compre el circuito", aseguró el alcalde de Sao Paulo, Joao Doria, que se negó a divulgar quienes son los compradores. "Esperamos que después de eso podamos extender por otros 10 años".

Doria agregó que la venta de Interlagos, que se encuentra en un área de casi 100 metros cuadrados, es "irreversible" y debería concretarse a principios de 2018. Se espera que la piste sea preservada tras la venta, pero edificios de apartamentos serán construidos en el complejo.

Sin embargo, concejales de Sao Paulo argumentan que la propiedad podría ser más rentable luego de la privatización, y que eso podría significar el fin de un circuito que fue inaugurado en 1940.

Dado que se desconoce quiénes son los potenciales nuevos dueños, no se les ha podido preguntar qué piensan sobre el proyecto del alcalde tras la privatización.

Algunos calculan que la venta del circuito Interlagos, que muchos consideran una carga para los contribuyentes porque no ha sido redituable por años, podría alcanzar los 600 millones de dólares.

El organizador del GP de Brasil, Tamas Rohonyi, dijo que otras sedes podrían reemplazar a Interlagos en caso que los nuevos propietarios no logren extender el contrato con la Fórmula Uno, pero no ofreció detalles.

"De lo que estoy seguro es que sin la F1, Interlagos estaría muerto", afirmó Rohonyi. "Y simplemente no sabemos quién estará en la mesa para discutirlo".

Rohonyi señaló que cree que los desconocidos nuevos dueños querrán mantener la F1 en Interlagos, mientras que el jefe de la Fórmula Uno, Chase Carey, ha dicho que "hay un gran futuro para Brasil en la F1".

El Gran Premio de Brasil ha enfrentado bajos niveles de audiencia por televisión en el país y poco patrocinio. La próxima temporada no habrá un piloto brasileño por primera vez desde 1969, lo que podría hacer que muchos más brasileños pierdan interés en la competencia.

Pero la venta de boletos para la carrera fue nuevamente buena este año, a pesar de que poco había en juego dado que el piloto británico Lewis Hamilton, de Mercedes, de antemano había ganado el título un par de semanas antes en Ciudad de México.

También lee: