After Office

Campamentos helados para tus hijos

Campamentos fuera de México, una gran experiencia para niños y jóvenes. Mundo Joven, la organización focalizada en fomentar el intercambio cultural a través de los viajes y el turismo educativo, es una de las mejores opciones.

Paisajes de ensueño son los que ofrecen en esta temporada de invierno ciudades como Vancouver y Quebec, en Canadá; Dublín, en Irlanda, y Nueva York, en Estados Unidos. Sus imponentes montañas nevadas y sus grandes lagos congelados son sólo parte de los atractivos de los campamentos durante los meses de diciembre a febrero, en los que lo ideal será practicar actividades recreativas como esquí, snowboard y más.

Mundo Joven, la organización focalizada en fomentar el intercambio cultural a través de los viajes y el turismo educativo, es una de las mejores opciones para encontrar el ideal para niños y jóvenes, quienes podrán hacer nuevos amigos con los que tendrán experiencias multiculturales, además de estudiar y practicar otro idioma como el inglés o el francés.

Instituciones como World Youth Student & Education Travel, Education Conference Organisers International y la Association of Languge Travel Organizations avalan y certifican los campamentos Live and Learn de la agencia de viajes.

"La edad adecuada para asistir a estos campamentos es entre los 10 y los 17 años porque es la etapa en la que ya son independientes en cierta forma, ya son más responsables, ya pueden valerse por sí mismos; esta es la etapa en la que con mayor facilidad logran la independencia, como despertarse solitos, llegar a clase, guardar y lavar su ropa", dice Lala Alatorre, gerente comercial de Live and Learn.

Lo que se pretende con este tipo de experiencias es incrementar el turismo educativo, generar mentes globales, multiculturales y fomentar en la juventud de México una visión distinta del mundo, pues esta propuesta va más allá, gracias a diversos programas, mismos que concluyen con los de maestrías.

Desde el punto de vista de Rubén Mora, director comercial de Mundo Joven, estos viajes son, a la larga, una inversión en la educación y desarrollo de los asistentes.

Según los ejecutivos, a través de los años la gente se ha acercado a ellos para agradecerles la experiencia, ya que sus hijos regresan mucho más seguros de sí mismos, con una nueva disciplina, con un mejor nivel de idioma y con una mayor riqueza cultural, adquirida tanto en el destino que visitan, como gracias a los compañeros con quienes conviven.

Estos campamentos también se pueden dar de una forma distinta, gracias a alojamientos con familias locales en donde tendrán una oportunidad directa de vivir las costumbres, las tradiciones y la educación, de forma más cercana, lo que también da la oportunidad de generar un cambio como ser humano.

También lee: