La nutrición no está fuera de lugar en un museo científico, explica Mónica Vilchis, coordinadora de medios y difusión del Museo Tecnológico de la CFE, ubicado en la Segunda Sección del Bosque de Chapultepec. "La ciencia y la tecnología están inmersas en la alimentación. Para saber que podemos comer determinadas frutas y lo que hacen, el efecto que producen en el organismo, es a través de la ciencia, y para procesar los alimentos, está implícita la tecnología. Todo va de la mano, la alimentación ha evolucionado, así como la medicina y muchas disciplinas; ahora hay una gran variedad de alimentos sanos y muchos son producidos en México".
El año pasado, en coproducción con tres museos europeos, se presentó la muestra Buen Provecho, que tuvo como cierre una primera feria con exposición y venta, talleres, conferencias y otras actividades para llamar la atención sobre la necesidad de mejorar los hábitos alimenticios basados en tres reglas: salud, placer y convivencia.
La exhibición, que se montó posteriormente en el Museo Interactivo de Ciencias Descubre, en Aguascalientes, y estará a partir de septiembre en el Museo Semilla, de Chihuahua, seguirá trasladándose a diversos espacios de la República. Y aunque no esté en el museo de la CFE, la feria Buen Provecho seguirá realizándose. La segunda edición será los próximos 9 y 10 de agosto, de 9:00 a 17:00 horas, con entrada libre.
"Es una buena oportunidad para pasar el tiempo en familia, hacer compras; hay artículos que no encontrarás en ningún lugar a este costo. Vamos a tener zumba masiva, el estreno de la obra de teatro El capitán Vigor Saludable, propiedad del museo. Muchos de los expositores, afortunadamente, van a repetir porque fue una experiencia muy agradable y ellos mismos nos están trayendo a otras personas. Vienen productores de botanas saludables, Lunchicuates, creadores de recetarios para niños, una combinación de los tres grupos del buen comer para ayudarle a las mamás a hacer el lunch de la escuela más divertidos y variados", adelanta la organizadora.
Serán 20 expositores de productos saludables, igual que el año pasado. Nutriólogos, sicólogos y otros especialistas de la UNITEC apoyarán las actividades, entre ellas música en vivo, todo para crear un ambiente en armonía. "Está comprobado que tu proceso de digestión es mejor cuando tienes un ambiente agradable. Hay degustación de productos, cursos, pláticas, teatro, un programa completo; las actividades son sin costo y lo que compres será a muy buenos precios, porque realmente lo que el expositor quiere es dar a conocer sus productos".
La exhibición y venta incluye alimentos, recetarios, libros, un huerto urbano y otras opciones para contribuir a una alimentación sana. "La feria se creó porque el año pasado mucha gente que venía a la exposición Buen Provecho, decía: 'Qué bien está esto de la ciencia de los alimentos, ¿pero dónde los encontramos y cómo los podemos balancear?'. Teníamos que compartir una labor adicional a la exposición de tal nivel y dar esas opciones. Es parte de nuestra labor, de hecho, la traducción literal de bon appétit es la ciencia de los alimentos", concluye Mónica Vilchis, quien recomienda acudir con gorra, usar filtro solar y demás cuidados porque todas las actividades se realizarán en la explanada del museo.