Tech

Heredero de Samsung involucrado en escándalo de tráfico de influencias

Autoridades de Corea del Sur están investigando si Samsung y otros grandes conglomerados realizaron pagos a entidades ligadas a la presidenta Park Geun-hye, a cambio de favores políticos. Este conflicto pondría en peligro la facultad de Jay Y. Lee para suceder a su padre al mando de la firma.

Fiscales especiales llamaron a declarar al vicepresidente de Samsung Electronics, Jay Y. Lee, para interrogarlo en calidad de sospechoso en una investigación sobre sobornos, lo que profundiza un escándalo de tráfico de influencias que ya llevó al juicio político de la presidenta de Corea del Sur.

El responsable de facto de Samsung fue citado a comparecer a las 9:30 del jueves en Seúl, dijo en un informe el portavoz de la fiscalía especial Lee Kyu-chul. Si bien se esperaba que Lee, de 48 años, fuera convocado para ser interrogado, el hecho de que se lo identificara como sospechoso causó sorpresa.

Corea del Sur ha estado sumida por meses en un escándalo presidencial. Millones de personas salieron a las calles para exigir la destitución de la presidenta Park Geun-hye. Las autoridades están investigando si Samsung y otros grupos empresariales del modelo chaebol (modelo empresarial basado en grandes conglomerados con presencia en distintos sectores económicos) realizaron pagos a entidades controladas por Choi Soon-sil, confidente de Park, a cambio de favores políticos. La creciente atención que concita Lee podría poner en peligro su facultad para suceder a su padre al mando de Samsung.

"Los fiscales especiales están principalmente tras Park, pero -en este caso- para acusar a Park de soborno, tienen que demostrar su relación con Samsung", explicó Chung Sun-sup, quien dirige la firma de investigación empresarial Chaebul.com. "Los fiscales en el pasado solían hacer caso omiso de las irregularidades de los chaebols, pero este escándalo es distinto, porque los ciudadanos ya no pueden tolerar la relación íntima entre la política y los negocios".

Los fiscales están investigando si Samsung apoyó a Choi a cambio de la ayuda del gobierno en los esfuerzos de Lee para tomar el control del conglomerado. En particular, quieren saber si la presidenta presionó al servicio nacional de pensiones de Corea para que respaldara la controvertida fusión de dos compañías de Samsung, Cheil Industries y Samsung C&T. La operación, rechazada por algunos inversionistas, fue aprobada en 2015 y facilita que Lee tenga más influencia en el extenso conglomerado fundado por su abuelo.

Si el aparente heredero acaba procesado en la investigación, quedarían desbaratados años de planes para que reemplazara a su padre. Lee es el único hijo del presidente de Samsung, Lee Kun-hee, y ha asumido algunas responsabilidades desde que su padre sufrió un ataque cardíaco en 2014.

"Sería casi imposible seguir adelante con el plan de sucesión de Samsung", dijo Kim Sang-Jo, profesor de la Universidad de Hansung. "Toda decisión de sucesión se aplazaría por un período considerable de tiempo".

Las oficinas de Samsung fueron registradas como parte de la investigación sobre Park y Lee debió responder preguntas del parlamento y los fiscales el año pasado. El lunes otros dos altos ejecutivos de Samsung fueron llamados a declarar sobre el papel que habría desempeñado la compañía. Este miércoles, los investigadores pidieron al parlamento que presentara una demanda contra Lee por falso testimonio durante su declaración parlamentaria, sin dar más detalles.

Un representante de Samsung Electronics no accedió a efectuar declaraciones. Las acciones de la compañía con sede en Suwon, Corea del Sur, alcanzaron un nuevo máximo el miércoles al subir 2.8 por ciento a un millón 914 mil wones al cierre de las negociaciones en Seúl, luego del positivo informe de resultados entregado la semana pasada y que puso de relieve la resiliencia de las operaciones de la compañía.

También lee: