Si los robots fueran prejuiciosos, ¿de quién será la culpa?

Una de las inquietudes más comunes sobre el creciente ámbito de la inteligencia artificial es la posibilidad de que los algoritmos absorban y repliquen prejuicios o sesgos sociales históricos, y casi todas las personas con mayor probabilidad de encarar ese desafío son hombres.

Cerca del 80 por ciento de los profesores que imparten conocimientos sobre inteligencia artificial en las principales universidades son hombres y el género masculino representa el 71 por ciento de los postulantes a puestos de trabajo ligados a dicho sector en Estados Unidos, de acuerdo con el Artificial Intelligence Index 2018 Annual Report, publicado el miércoles.

Este análisis es realizado de forma colaborativa y es conducido por organizaciones universitarias e industriales.

No obstante, el informe dio a conocer un aspecto positivo: la asistencia a talleres y conferencias organizadas para respaldar a las mujeres y a otros grupos con poca representación, si bien sigue siendo baja, creció más de siete veces.