Estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Sur ganaron el primer lugar de la categoría SuperTeam en el RoboCup Junior 2014 celebrado en João Pessoa, Brasil, campeonato que se suma a los 5 primeros lugares conseguidos por alumnos del IPN en el RoboCore Winter Challenge 2014.
Además, el segundo lugar del certamen fue obtenido por alumnos del plantel 6 Antonio Caso y 8 Miguel E. Schulz. de la Escuela Nacional Preparatoria, asesorados por Sergio López Luna, del plantel 6, y Norma Angélica González Sandoval del plantel 8.
El equipo que se llevó la medalla de oro estuvo conformado por Karina Guadalupe González Moreno, Karen Itzel Tenorio Vélez y Ricardo Manrique Arias, quienes fueron acompañados a la competición por sus mentoras Lisette Castro Gómez y Edna Márquez Márquez, encargada del Club de Robótica en el CCH Sur.
"Trabajamos en conjunto con nuestros profesores desde marzo. Estamos dispuestas a prepararnos para la justa de 2015, que será en China", explicaron las jóvenes, citadas en un comunicado de la UNAM.
Tanto Karen Itzel como Karina Guadalupe apenas se inscribieron a su primer semestre de la licenciatura en Ingeniería en Mecatrónica.
El equipo, llamado CoSurSpace, compitió en la categoría Cospace Rescue SuperTeam, del 20 al 25 de julio, que consistió en operar un robot virtual y uno real mediante algoritmos alimentados por los alumnos, para cumplir tareas como la recolección de objetos de diferentes colores y la evasión de obstáculos.
La modalidad SuperTeam consiste en la colaboración con otros dos grupos y los mexicanos trabajaron con un equipo proveniente de Japón y otro de Reino Unido.
Por su parte, la Escuela Nacional Preparatoria repitió el segundo lugar en la competición, que obtuvieron en 2013 en el rubro Super Team en Eindehoven, Países Bajos.
En esta ocasión estuvieron asesorados por Sergio López Luna, del plantel 6, y Norma Angélica González Sandoval del plantel 8.
López Luna explicó que en esta edición los universitarios compitieron en la categoría Cospace Rescue, en la que los robots fueron programados en un ambiente virtual y otro real.
Cada representación dispuso de ocho minutos para las actuaciones y el equipo preparatoriano trabajó en conjunto con otro de Japón, en la modalidad SuperTeam, con el que se comunicaron a través de un traductor electrónico.
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