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¿Cómo salvar puestos de trabajo del 'robocalipsis'? Imita a estos países

Varios estudios alrededor del mundo predicen cómo millones de puestos de trabajo serán eliminados por los robots, sin embargo, el grupo financiero Nordea Bank AB tiene la respuesta para sacar el máximo provecho a la automatización y mantener el equilibrio. 

¿Está a cargo de un Gobierno y preocupado por cómo salvar millones de puestos de trabajo ante la futura automatización?

​Nordea Bank AB
(grupo que ofrece servicios financieros y que opera en el norte de Europa, con oficinas centrales en Estocolmo) tiene la respuesta: sólo hay que hacer como los escandinavos.

Según la última Perspectiva Económica del mayor banco de la región, la mejor manera de inmunizar su economía respecto al futuro es tener una fuerza laboral capacitada y una baja desigualdad, dos características que abundan en los países nórdicos.

"Mucho trabajo será reemplazado por robots", dijo el economista sénior de Nordea, Erik Bruce, en una entrevista. "La diferencia es que estamos mejor preparados porque compartimos la opinión de que debemos tener una distribución justa de los ingresos y nos aseguramos de que la gente esté capacitada para asumir un nuevo rol".

¿Su principal consejo para los responsables de las políticas? "La educación gratuita probablemente no sea la única solución, pero es un buen comienzo".

Bruce y su colega Joachim Bernhadsen citan varios estudios que predicen cómo millones de puestos de trabajo serán eliminados por la automatización. Sin embargo, los dos analistas concluyen que, en lugar de preocuparse por lo que ellos llaman el inminente "robocalipsis", los Gobiernos deben extender una alfombra de bienvenida a los robots.

Como señalan los autores, el temor a que las máquinas vuelvan obsoletos a los humanos en el lugar de trabajo no es nuevo (el término "ludismo", que describe un movimiento de resistencia al cambio tecnológico, deriva del accionar de un grupo de trabajadores textiles que destruyeron maquinaria en la Inglaterra del siglo XIX).

También se oponen a la hipótesis en que se basan algunos estudios alarmistas, a saber, que la próxima revolución industrial destruirá muchos más puestos de trabajo de los que creará. Más bien, argumentan que se desarrollará a un ritmo más modesto de lo que muchos anticipan, y seguirá un patrón familiar –transformando, en lugar de eliminar, muchas de las tareas de los trabajadores en riesgo.

Sin embargo, hay una condición.

Para sacar el máximo provecho de la automatización, los Gobiernos deben garantizar altos niveles de educación y fomentar el aprendizaje a lo largo de la vida, ya que ambos permiten a los trabajadores que caen fuera del mercado laboral readaptarse fácilmente. El segundo aspecto, y tal vez el más controvertido, es minimizar la desigualdad. Los analistas citan un estudio de David Autor de 2015 donde se sugiere que las computadoras e internet ya han tenido "un efecto material sobre la distribución del ingreso en Estados Unidos", favoreciendo la mano de obra altamente calificada.

Así es cómo Finlandia y Escandinavia se desempeñan en los dos aspectos:En cuanto a la educación, no sólo superan el promedio de la OCDE en términos de calificaciones PISA, sino que también tienen un excelente historial en la promoción del aprendizaje permanente. No hay aranceles universitarios en los países nórdicos, y casi cualquier persona puede permitirse el lujo de estudiar gracias a la red de seguridad del estado de bienestar. En Dinamarca, por ejemplo, los estudiantes mayores de 20 años reciben una prestación mensual de 6 mil coronas 953 dólares) del estado.

En cuanto a la desigualdad de ingresos, no sorprenderá saber que la región con algunas de las tasas más altas de impuesto a las ganancias del mundo tiene una puntuación particularmente buena.

Como evidencia, basta mirar cómo la globalización ha afectado a los nórdicos. No sólo estas pequeñas economías orientadas a la exportación se han visto enriquecidas por el aumento del libre comercio, sino que hasta ahora se han salvado de gran parte de la agitación social resultante que se observa en otros lugares.

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