Mustang 2015, #PlayForever

LOS ÁNGELES. Lo vimos hace poco menos de un año en este mismo lugar, con los reflectores de Hollywood y el paseo de la fama a sus pies, otra vez fue presentado este ícono automotriz. Ahora y ya listo en su quinta generación, Ford nos invitó a conocer y conducir el auto completamente terminado y de producción que será vendido en breve no sólo en Estados Unidos sino que en México lo tendremos antes de que termine octubre.

Por fuera no niega su pasado, líneas extendidas hacia el frente y una parte trasera que acoge el toldo en forma aerodinámica para conferirle esa estética de fastback que ha caracterizado al Mustang.

Es la parte posterior quizá la que más rasgos guarde con los modelos previos, pero al ir recorriendo el auto hacia el frente, observamos que los costados lucen grandes y limpios en su diseño, con trazos que se combinan con el frontal, que desde nuestro punto de vista es uno de los más bonitos en este auto. Los grupos ópticos son pequeños pero acusa una gran personalidad deportiva y además guarda la carga genética que Ford le ha puesto a la mayoría de sus autos a nivel mundial. Una parilla grande que se conjuga con la fascia y que nos deja ver una mirada de corcel presta para salir avante en cualquier momento, rápido y preciso. Gusta a la primera mirada. Los rines en diferentes diseños se conjuntan adecuadamente con el cuerpo del auto dotándolo de esa personalidad musculosa y bien definida de auto deportivo.

En la versión con paquete Sport, nos reciben sendos asientos con la firma Recaro y que abrazan tanto al conductor como al pasajero, pero sin ellos, los que monta de serie son muy buenos incluso, estos últimos ofrecen reglaje eléctrico y calefacción así como enfriamiento para los ocupantes.

La parte trasera da cabida a dos personas de tamaño medio, ya que la caída del medallón y el poste C cobran factura por la aerodinámica del auto en contra de sus ocupantes. Nada que sea molesto.

La carga tecnológica nos ha sorprendido, ya que tanto en la versión Ecoboost como en el GT (V8) el cuadro de instrumentos, consola y controles en general han sido cuidadosamente colocados y éstos ahora se encuentran a la mano del conductor para facilitar su funcionamiento.

Sólo por mencionar algunos detalles del auto, el nuevo Ford Mustang lleva encendido del motor por botón, llave inteligente, Pantalla LCD sensible al tacto de ocho pulgadas y nueve funciones que pueden ser operadas directamente en la pantalla o a través de comandos de voz: clima, teléfono, información, navegación, destino, mapa, menú, audio DVD, USB, bluetooth y SYNC. Más abajo en la consola, además lleva varios botones para permitir el "derrape" de las llantas traseras frenando automáticamente las delanteras, detalle que no pudimos dejar de probar y gastar un poco de goma.

En general habrá tres versiones de mecánicas para el Ford Mustang, sin embargo, para nuestro mercado llegarán de primera instancia el V6 de 3.7 litros y 300 hp naturalmente aspirado y el ya clásico y muy bien afinado V8 de 5.0L denominado GT que produce 435 caballos de potencia. Estas mecánicas están asociadas a transmisiones manual y automática de seis velocidades. Más adelante, quizá en seis meses llegará el Mustang con el motor de cuatro cilindros de 2.3 litros Ecoboost (Turbo) que genera 310 hp con un torque similar y que tuvimos la oportunidad de manejar en California. Es importante destacar que todos los Mustang llevan de serie ABS, BA, TC y ESP con frenos de disco en las cuatro ruedas y para las versiones con el paquete Sport frenos de seis pistones firmados por la italiana Brembo.

Nuestra primera prueba de conducción fue el Mustang con mecánica Ecoboost de 310 caballos y transmisión manual de seis velocidades. Nos sorprendió que el motor es muy silencioso pero no por ello dormido. Aceleramos y justo al pasar las 3 mil rpm despertó el corcel que lleva dentro. La entrada al Freeway fue sencilla y rápida notando una palanca de cambios corta pero con relaciones muy bien escalonadas. Llegábamos a 60 mp/h (96 km/h) en menos de siete segundos y aplicábamos los frenos que, dicho sea de paso, son muy eficientes y su funcionamiento es correcto. La maniobrabilidad fue buena, la visibilidad hacia el exterior también pero si uno trata de pasarse con el acelerador, la tracción trasera y la suspensión se sentirán un poco nerviosas, pero nada que no podamos controlar. El momento de conducir el V8 llegaba después de un lounch californiano. Nos esperaban 120 kilómetros para gozar del sonido, potencia, respuesta y diversión del ya clásico motor de la familia Ford. Y claro una vista del Océano Pacífico.

Y es que manejar el Mustang con el V8 naturalmente aspirado se vuelve una adicción justo al ver todos los autos japoneses y coreanos frente a nosotros. Es una sensación de tratar de "aspirarlos" al momento de acelerar. Nos divertimos, aprendimos y gozamos de este nuevo corcel que sin duda alguna y para los más fanáticos del mismo simplemente cumplirá con todo lo que ofrece y más.

No queda más que esperar la llegada del mismo a México y ya en territorio nacional haremos una prueba más a conciencia para compartir con ustedes estimados lectores nuestras percepciones del auto con más kilómetros manejados.

De momento les compartimos los precios del auto para que vayan por el a su agencia más cercana Ford. El convertible lo veremos hasta inicios de 2015.

Habrá seis colores para el mercado mexicano como el Rojo Racing, Naranja Flama, Amarillo Deportivo, Plata Estelar, Negro y Blanco Oxford.