Moda preppy, lo de hoy

Sin embargo, el look preppy no es realmente una novedad. Para entender la esencia de lo preppy o prep, debemos remitirnos al ambiente del campus especialmente a esas universidades famosas de la costa este de los Estados Unidos, como las emblemáticas Harvard, Yale o Princeton, por mencionar algunos de estos sitios a los cuáles suelen asistir los jóvenes de las familias adineradas.
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Pues bien, son precisamente estos individuos los que le dan la pauta al estilo preppy que en su contexto original significa algo así como snob o lo que conocemos en México como fresa. La forma de vestir de este privilegiado grupo fue retomado por diseñadores, la mayoría de origen norteamericano, como Ralph Lauren, Carolina Herrera o Tommy Hilfiger

Este último, precisamente, ha sido quien ha utilizado lo prep como su bandera y a través del diseño, tanto como de sus campañas comerciales, lo ha llevado a otro nivel. Pues bien, ahora este look es una moda masculina global a la que, como es natural, se le han añadido nuevos elementos pero aún así su ADN sigue siendo el mismo. Por eso el clásico prep cuenta con prendas básicas como:

Las camisas sport con el botton dow collar, en la que las puntas del cuello están sujetas al cuerpo de la camisa por un botón, preferentemente en colores pasteles o con dibujos como rayas o cuadros en combinaciones donde los colores clásicos, como el azul marino o el blanco, se mezclan con tonos alegres como el naranja, el rosa, el verde limón y demás.

*Los clásicos pantalones khaki, como los de la firma Dockers, son un must have del universo preppy. También se puede optar por los jeans, eso sí, que estos sean de un color uniforme sin rasgaduras ni acabados atrevidos pues estos detalles los colocan en otros escenario como, por ejemplo, el mundo del rock. Otro pantalón que es admisible en este código tan particular de la indumentaria son los llamados chinos que son prácticamente iguales a los de mezclilla solamente que confeccionados en gabardina de algodón de distintos colores.

Suéteres y más suéteres, definitivamente el tejido de punto juega un papel crucial en los outfis calificados como preppys. Desde el clásico jersey que se lleva anudado en torno a los hombros, pasando por chalecos, bufandas y hasta llegar a los icónicos calcetines de rombos o "cocolitos". El sentido lúdico que es un importante subtexto de lo prep y se introduce a la vestimenta precisamente con las prendas de punto por sus texturas llamativas y sus juegos de color que le restan seriedad y le dan ese aire de desenfado propio del ambiente universitario.

Sacos sport y chaquetas, en el mundo académico para vestir de manera formal lo propio es usar un coordinado con un saco sport en distintos tipos de casimir o incluso pana, eso sin mencionar el lugar común que es blazer azul. Pues bien si ampliamos el espectro de posibilidades la función con la que cumple esta prenda también la puede hacer una chaqueta o un abrigo corto. Lo importante es entender que en lo preppy es posible para las prendas casuales interactuar con las sartoriales. No puede faltar una colorida corbata tipo regimiento o mejor aún, una corbata de moño con algún divertido dibujo.

Los zapatos también tienen lo suyo, los mocasines tipo penny loafer o los típicos bostonianos son el calzado de este estilo pero estos han evolucionado a una serie de híbridos con variaciones en la formas, materiales y suelas. Lo cierto es que lo que más se lleva por el momento son los famosos sneakers, una fusión entre el calzado deportivo y el de vestir.

Desde que surgió la corriente conocida como hipsters, estos asumieron mucho del tradicional look preppy y le sumaron nuevos elementos dándole otra lectura. Hoy por hoy lo preppy es una subdivisión de lo hipster razón por la que es extremadamente fashion, no es fortuito que este estilo ya haya sido asumido y reinterpretado por prácticamente todos los grandes de la moda.

Ahora lo preppy es el mismo atuendo del campus pero más audaz: sacos más cortos y ceñidos, pantalones slim, bostonianos de colores, coloridas corbatas de moño y ni hablar de los calcetines que rayan en lo psicodélico. Esto acompañado siempre por un pañuelo de seda en el bolsillo del pecho del saco y un par de lentes oftálmicos de marca, por supuesto.