CULIACÁN. Al arrancar el operativo de seguridad y vigilancia de la Semana Santa en Sinaloa, el gobernador Mario López Valdez, dispuso que los 70 escoltas de los funcionarios de su administración, se agregarán a los diez mil elementos de las corporaciones policíacas para brindar protección a más de un millón y medio de paseantes que se esperan en los 270 centros de recreo en los 18 municipios de la entidad.
Dijo que se pretende que en los balnearios no haya libertinaje ni mucho menos desgracias que lamentar. Por ello, exhortó a los elementos de Policía, Ministerios Públicos, agentes de Tránsito, Protección Civil y hasta de la Cruz Roja, a que atiendan lo mejor posible a los paseantes.
Destacó que el turismo se ha consolidado en Sinaloa con la carretera panorámica Mazatlán-Durango con lo que se espera que aporte un 13.4 por ciento al Producto Interno Bruto (PIB) de la entidad durante el presente año.
La mayor vigilancia se concentra en el puerto de Mazatlán donde están agotadas todas las reservaciones porque la ocupación hotelera está al cien por ciento, a tal grado de que el presidente municipal, Carlos Eduardo Felton recomienda a los turistas que si no tienen reservación de hospedaje, que ni se les ocurra llegar al "cama arena" porque la policía lo impedirá.