Sociedad

Acusan a otros dos sacerdotes por abuso de menores en SLP

Los curas pederastas son Noé Trujillo y Javier Castillo, se suman al padre Eduardo Córdova, quien hasta el momento se encuentra prófugo.

SAN LUIS POTOSÍ, SLP.- La justicia estatal investiga a los sacerdotes Noé Trujillo y Francisco Javier Castillo por abuso de menores, informó el secretario de gobierno, Cándido Ochoa Rojas, además del cura Eduardo Córdova Bautista, acusado desde hace 30 años por la misma causa.

El funcionario estatal declaró que "en cuanto aparezcan (los dos sacerdotes), se les capturará, donde sea", esto tras ser cuestionado sobre la situación de Córdova Bautista, quien se encuentra prófugo de la justicia y suspendido por el Vaticano.

Ochoa Rojas detalló que la fiscalía del estado sigue estos dos casos más de posible pederastia clerical, pero "seguramente hay una suspensión (de amparo) que nos impide (detenerlos) pero seguiremos de cerca los asuntos para ejecutar las órdenes de aprehensión".

El secretario de gobierno aseguró que independientemente de cualquier pronunciamiento o deslinde que haga cualquier persona, se está procediendo a la apertura del expediente y su integración.

Uno de los dos casos adicionales a los de Córdova se refiere al sacerdote de municipio de la Soledad, Noé Trujillo, quien fue acusado del delito de estupro en contra de una menor de 14 años.

La madre de la menor de edad descubrió en la cuenta de facebook de su hija, que tenía comunicación con una persona que le proponía encontrarse y tener relaciones sexuales en una cabaña, y a raíz de ello la señora formuló la denuncia, informó la prensa local.

Dijo que su hija le relató que el religioso se la llevó a un poblado que no identificó, en donde sostuvo relaciones sexuales con ella.

Por otra parte, Francisco Javier Castillo, sacerdote de la iglesia del Sagrado Corazón en la comunidad de Ojo Caliente del municipio de Santa María del Río, fue denunciado ante la Procuraduría por abuso sexual de un menor. La queja fue presentada en 2012.

En tanto, el padre Eduardo Córdova, fue representante legal de la arquidiócesis y contacto entre el poder político y el religioso; profesor en varios colegios católicos de la alta sociedad potosina y uno de los curas preferidos de la capital.

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