CIUDAD DE MÉXICO. Gustavo Madero defendió su asistencia a la Asamblea Nacional del PAN, al asegurar que no aceptó la invitación que le hizo la dirigente nacional, Cecilia Romero, de asistir como candidato, pero en cambio sí confirmó su presencia como delegado.
El dirigente con licencia sostuvo que siempre contempló acudir a la asamblea y negó que rompiera algún acuerdo.
El equipo de Madero, presumió tener el dominio de cerca del 75 por ciento del Consejo Nacional, es decir de los 270 miembros, al menos 200 afines.
En días pasados, la dirigente, Cecilia Romero, hizo una invitación a los candidatos a la dirigencia nacional y a sus equipos para asistir al evento, pero ambos declinaron.
En un comunicado, Ernesto Cordero, criticó que a última hora Madero se presentara en la asamblea y acusó que más allá del argumento jurídico, "es lamentable constatar que la palabra empeñada" no tiene valor para Madero.
"El aspirante a la reelección se mantuviera en lo dicho, Madero, simple y sencillamente, se negó y, con ello, faltó a su palabra. Qué pena" afirmó el ex secretario de Hacienda.
La Asamblea Nacional del PAN concluyó con la ratificación de 270 de los 300 consejeros nacionales. Por la tarde instalarán su primera sesión formal en las instalaciones del Comité Ejecutivo Nacional.
No obstante, el consejo queda incompleto, ya que 30 integrantes deben ser electos por el próximo CEN y el nuevo dirigente.
Otra designación que queda pendiente es la de la figura de la Comisión Permanente, que será la encargada de avalar las decisiones de los consejeros.