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El presidente Enrique Peña Nieto refrendó el compromiso de su gobierno con la construcción de infraestructura para mitigar los efectos de fenómenos como sequías, ciclones e inundaciones, que en los últimos diez años han generado pérdidas al país por más de 25,000 millones de pesos.
Al inaugurar la estructura de control de la compuerta de El Macayo, reconoció que la inversión que se haga de carácter preventivo para abatir los efectos de las lluvias es, sin duda, menor a lo que se canalizaría en las acciones correctivas, de no llevarlas a cabo.
Destacó que esa obra, cuya construcción implicó una inversión de por lo menos 1,100 millones de pesos, tendrá capacidad para distribuir las aguas de los ríos Samaria y Carrizal, y ayudará a desalojar hasta 2,300 metros cúbicos de agua por segundo para evitar inundaciones en Villahermosa, Tabasco, como las de años previos.
"Por eso, en el Gobierno de la República y con toda planeación, hemos emprendido un programa de inversión desde este año que nos permita realmente de forma preventiva mitigar efectos mayores sobre todo en la temporada de lluvias", subrayó.
Llamó a los tres niveles de gobierno a enfrentar el desafío con decisión, porque "en México durante los últimos diez años hemos tenido sequías, inundaciones y ciclones que han ocasionado lamentablemente decesos, millones de personas afectadas y más de 250 mil millones de pesos en pérdidas materiales".
El presidente de la República advirtió que esos datos "nos obligan como sociedad a dar más atención a la prevención para contar con infraestructura que mitigue los riesgos".
Reiteró el compromiso de su administración para trabajar en una gran armonía y sincronización con las autoridades estatales y municipales.
"Todas tenemos el mismo propósito servir bien y de manera eficaz a la sociedad a la que nos debemos y hoy precisamente con menos palabras y con más hechos estamos dando pasos en ese sentido", recalcó.
Ante los gobernadores de Tabasco y Chiapas, Arturo Núñez Jiménez y Manuel Velasco Coello, respectivamente, así como el titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), David Korenfeld, Peña detalló que El Macayo tiene el objetivo fundamental de reducir el riesgo de inundación en Villahermosa y las poblaciones ribereñas.
Puntualizó que se trata de una obra hidráulica estratégica pues se diseñó para la cuenca que más agua tiene en el país y es la séptima a nivel mundial.
"Es ejemplo de la infraestructura que tenemos que construir en todo el territorio nacional para que el agua sea una fuente de vida y prosperidad en lugar de ser un riesgo para la vida, integridad o patrimonio de los mexicanos", sentenció.
Instruyó al director de la Conagua para que establezca un plan de acción con los gobiernos de Tabasco y Chiapas con el fin de que se generen más beneficios en la zona a partir de las obras.
El mandatario aseguró que como presidente de la República le resulta alentador el contacto y la cercanía con la gente de todo el país para escuchar sus preocupaciones e inquietudes.
Remarcó que durante su administración se echó andar el Programa Nacional contra la Sequía y el Programa Nacional de Prevención contra Contigencias Hidráulicas.
También surgió el proyecto hidrológico para proteger a la población de inundaciones y aprovechar de mejor manera el agua, para lo cual se enlistaron 185 acciones y obras en infraestructura hidraúlica, agua potable, alcantarillado, drenaje y sistemas de alerta temprana, una acción fundamental para prevenir y tomar acciones de manera acelerada.
En su oportunidad el comisionado nacional del Agua explicó que El Macayo tiene una importancia estratégica para el control de las inundaciones, pues su función por el Río Carrizal es que no pasen más de 850 metros cúbicos por segundo, que es la cantidad que puede llevar ese río sin representar riesgos a la capital tabasqueña.
Sostuvo que ese trabajo es muestra de la transformación hidráulica del país y confió en que dará resultados a corto, mediano y largo plazos, además de que garantiza sustentabilidad y desarrollo.
David Korenfeld también convocó a los gobernadores y presidentes municipales a trabajar en equipo y a tener una sola visión de colaboración hídrica.
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