CIUDAD DE MÉXICO. Frente al escenario complejo que se vive en algunas entidades del país, el presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, aseguró que el uso de la fuerza pública como auxilio de la autoridad electoral debe ser el último recurso, y ser determinado por el Estado en caso de ocurrir una situación extrema o cuando el personal del instituto o los ciudadanos que participen en el proceso electoral encuentren en riesgo su integridad física.
"El mandato constitucional es hacer elecciones, pero el límite es garantizar la integridad física de los ciudadanos, concurriendo al ejercicio de construcción colectiva que son las elecciones", dijo.
Hasta el momento, el consejero presidente aseguró que no tienen pensado pedir la colaboración de las fuerzas federales, pero recordó que esta no es responsabilidad del INE:
"El escenario ideal para organizar elecciones es que haya un contexto de paz pública, queremos el mejor escenario para que la elección se lleve a cabo. No queremos estado de sitio, ni un estado de policía, pero es evidente que no nos toca determinarlo, ni es nuestra responsabilidad".
Entrevistado al término de la sesión extraordinaria, Córdova reconoció que en el caso de Guerrero, no hay las mejores condiciones, pero afirmó que aun así se está trabajando junto con órganos federales, locales, partidos, y que hay acercamientos también con organizaciones no gubernamentales, universidades y una multiplicidad de actores para construir las mejores condiciones.
"No vamos a cejar en ningún esfuerzo para que haya elecciones, pero eso no quiere decir que las vamos a hacer pase lo que pase y a toda costa".
Pidió ponderar lo que está ocurriendo, ya que la aplicación de exámenes a capacitadores solo se suspendió en el distrito de Chilpancingo y en uno de los cinco locales en el distrito de Tlapa, pero en el resto se realizaron y hubo una buena respuesta de los aspirantes a capacitadores.
No obstante, admitió que en donde no se realizaron las evaluaciones se tendrá que instrumentar "un plan B" para generar las condiciones ante la situación "de excepcionalidad" que se vive