CIUDAD DE MÉXICO. A horas del único debate que sostendrán los candidatos a la dirigencia nacional del PAN, los equipos de campaña adelantaron cuál será su estrategia, aunque en medio de descalificaciones.
Ernesto Cordero y panistas del DF acusaron a Madero de falsificar firmas para su registro y revelaron que el delegado de Benito Juárez, Jorge Romero, se reunió con el ahora ex líder del PRI-DF, Cuauhtémoc Gutiérrez -acusado de sostener y financiar una red de prostitución- para concretar una alianza electoral.
El ex secretario de Hacienda sentenció que de ganar la dirigencia del partido "jamás negociará en lo oscurito" una alianza con el PRI.
"El PAN debemos considerarlo como una fuerza propia que puede y debe ganar elecciones por sí mismo… pero jamás la nueva dirigencia del PAN va a imponer una alianza a espalda de los militantes y mucho menos en el DF con Cuauhtémoc Gutiérrez", indicó.
El panista insistió en acusar al secretario de Desarrollo Social de BC de "tener dos cachuchas" ya que también es jefe estatal de la campaña de Madero y en Puebla, recordó es el propio gobernador, Rafael Moreno Valle, quien "intimida y amenaza a los militantes".
Cordero se quejó del debate y de la Comisión Organizadora de Elecciones, reiterando que "no hay piso parejo".
Por separado, Marko Cortés, coordinador de campaña de Madero, aseguró que lo que está haciendo Cordero con estas denuncias y quejas es "pavimentar su derrota" y allanar el camino para impugnar el proceso interno ante tribunales.
El michoacano adelantó que durante el debate Gustavo Madero no descalificará, ni denostará a su compañero y que demostrará porque debe reelegirse en el cargo.