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Las vacaciones de verano representan un periodo en el cual los accidentes de niños menores de 16 años aumentan hasta en 20%, por lo que es necesario tomar muchas precauciones, sobro todo en el hogar.
El sitio principal en el que los pequeños están más expuestos a sufrir un tipo de accidente es en el hogar, ya sea por quemaduras, acercarse a la estufa o a enchufes, e incluso por ingerir productos tóxicos, advierte Médica Sur.
De igual forma, otros de los padecimientos más comunes por los que los niños ingresan en este periodo al hospital son fiebre, infecciones respiratorias y dolores abdominales, por lo que los padres siempre deben tener identificado el hospital más cercano.
Según la empresa que maneja unidades médicas, 31% de los menores que ingresan a sus nosocomios son niños de siete a 12 años; 26% son lactantes (de 1 a 24 meses); 25% son niños de 3 a 6 años y 16% adolescentes.
Sólo 2.0% corresponde a recién nacidos, de uno a 29 días de edad; mientras que del total de los pacientes menores de 16 años, alrededor de 56% son varones y 44% mujeres.
La empresa recomienda acudir a urgencias cuando los niños presenten fiebre que no cede, dificultad para respirar, coloración azul en los labios, vómitos o evacuaciones constantes, tristeza por más de tres días o lesiones y heridas en la piel.
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