Yoisi Moguel / María Luisa González
MÉRIDA.- Ernesto Cordero Arroyo pidió a su partido ponerse de nuevo de pie, dejar de aplaudir al presidente Peña Nieto y dedicarse a trabajar para plantear las estrategias que sean necesarias para recuperar la identidad del Partido Acción Nacional y darle el rumbo que demanda.
De visita en Yucatán el legislador acusó al actual líder nacional panista, Gustavo Madero de haber propiciado la pérdida de la identidad de panista al ser solo un aplaudidor más del Ejecutivo Federal y no un líder partidista que defienda los ideales del partido.
El PAN, advirtió, ha perdido rumbo y sus ideales de lucha que le dieron identidad y para lo cual fue creado, ahora como partido político está dedicado y preocupado en alabar al presidente Peña Nieto y se ha olvidado de defender las banderas de toda la vida.
En ese sentido Cordero Arroyo consideró necesario y prioritario recuperar la dignidad de Acción Nacional, ponerlo de pie y darle un nuevo rumbo, para devolverle su identidad.
Los panistas, resaltó, deben sentirse orgullosos de todo lo que se hizo cuando el PAN gobernó, es el momento de regresarle al PAN el sentido democrático, de lucha, y volverlo hacer gobierno.
Empero, se requiere que elegir un nuevo presidente del Comité Ejecutivo Nacional de su partido, en un proceso que tiene que ser parejo, que se den las condiciones de igualdad y equidad para todos los aspirantes.
Al respecto señaló que si Gustavo Madero quiere volver a ser el líder nacional que renuncie a su cargo y compita en iguales condiciones que los demás aspirantes.
El ser el presidente actual del partido, dijo, el otorga cierta ventaja, porque es el único que conoce el padrón, y también aprobará muchas de las reglas que regirán la contienda interna del PAN.
Cordero Arroyo indicó que en estos momentos se está aprobando el reglamento para el proceso interno, donde se buscará establecer condiciones de justicia y equidad para todo, que esté el piso parejo para todos, para todos compitan en las mismas condiciones.
Por otra parte, Cordero Arroyo acusó al dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero, de emprender una serie de maniobras para "sacar ventaja" a otros aspirantes al cargo cupular y afianzar así eventualmente sus posibilidades de reelección, como no hacer público ni "compartir" el actualizado padrón de militantes.
En el estado de Aguascalientes, señaló que "el único que lo utiliza es él para establecer contacto con la militancia, lo que le da una gran ventaja, cosa que ni Josefina (Vázquez Mota), ni Oliva (Juan Manuel) ni Héctor Larios ni yo tenemos", dijo el legislador, tras insistir en que solamente habrá garantías de "piso parejo" en el proceso de renovación del CEN si Madero renuncia.
Demandó también una "investigación puntual" de los supuestos "condicionamientos" en la asignación de recursos a municipios, cuestión que inmediatamente después fue reducida a "chismes" por el coordinador de la bancada panista en el Senado, Jorge Luis Preciado Rodríguez, quien, con dejo irónico, apuntó que si se hiciera caso a ellos "imagínense cuánto se tardarían en investigarlo".
Abordado en el mismo acto –el primer informe del también senador por Aguascalientes, Fernando Herrera Avila-, Preciado Rodríguez sostuvo que eso era "absolutamente falso" y que Gustavo Madero no necesitaba "favores políticos" para ser reelegido.
También en tácito revire, estableció que Cordero Arroyo como los demás aspirantes al cargo cupular podrán tener acceso al padrón de militantes en el momento que se registren como candidatos y que este proceso sólo podrá abrirse hasta que se apruebe el reglamento para las elecciones internas.
Respecto a las demandas de que Madero renuncie, reiteró que era una cuestión que solo a él competía "y a los 285 mil panistas inscritos en el padrón decidir a través del voto quién será su próximo presidente y fijar el rumbo del partido".