Angelle Hernández Cháirez
Luego de los emotivos discursos de despedida, inusuales aplausos, críticas de la izquierda y reconocimientos a los cuatro integrantes del Consejo General que concluyeron su periodo, surgió una pregunta en el aire, ¿quién será el nuevo presidente sustituto del Instituto Federal Electoral?
--¿Usted es el bueno?- se le preguntó a Benito Nacif, a lo que vinieron risas y caras de sorpresa.
"¿Quién es el bueno?, los cuatro que nos quedamos para trabajar de la mano y dar certidumbre. jurídica" replicó.
--¿Cuándo se destapa? se inquirió a Marco Baños.
-- Hasta dentro de seis meses – respondió sonriente.
Formalmente Leonardo Valdés concluye su cargo hasta el primer minuto de este jueves, por lo que en conferencia de prensa, anunció que dejó firmada una convocatoria para que sesione el Consejo y elija a quien será su relevo "de manera temporal", ante la incertidumbre que se vive con la dilación de los legisladores para ocupar las cinco vacantes.
El consejero Alfredo Figueroa, quien se va, puso otro escenario en la mesa.
"No hay consejero presidente sino se tienen los dos tercios de aprobación de la Cámara de Diputados, esos dos tercios los ha tenido y más Leonardo Valdés. Si mañana no hubiera presidente, nuestros colegas, cualquiera de ellos, presidirán las sesiones. Pero debe quedar absolutamente claro en el espacio público que hasta que la Cámara vote, no hay un consejero presidente".
Frente a la otra posibilidad que es la desaparición de la actual estructura del instituto para darle lugar a un nuevo Instituto Nacional de Elecciones, los consejeros hicieron un llamado a los diputados, para que se respete la permanencia de quienes aún no terminan su encargo.
"Como se dice vulgarmente, ¡esta es la última y nos vamos!" manifestó Francisco Guerrero, quien anticipó que sería "un error gravísimo" que quienes no han terminado su encargo no aparezcan "en la siguiente línea de consejeros", ya sean nueve u once.
Macarita Elizondo, propuso a sus ex compañeros, que ante la falta de acuerdos en el Legislativo y la ausencia de consejeros, en la "herradura de la democracia" se dejen puestas las sillas vacías para que en cada sesión futura del Consejo General se "demuestre que faltan mayorías y se apele a una futura designación".
Lorenzo Córdoba, alertó que las semanas que vienen se pueden convertir "en una crisis institucional" para el IFE, ya que se acercan momentos "críticos e inéditos" y que a menos que ocurra "un milagro" en San Lázaro en las próximas horas el IFE tendrá que seguir con sus responsabilidades "con un consejo general mermado como nunca antes y una falta adicional y particularmente delicada, la falta de un presidente".
En su última arenga, luego de cinco años de ejercicio, Leonardo Valdés, aseguró que tuvo una presidencia "mesurada", aunque reconoció "fricciones" con los partidos políticos por el arbitraje electoral y el modelo de comunicación política.
Pese a ello, garantizó que dejó IFE mejor posicionado al que le tocó recibir. Aun con diferencias los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional reconocieron y elogiaron la labor de los integrantes del instituto. El PRD le reprochó el caso Monex.
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