Ciro Castillo / corresponsal
Tuxtla Gutiérrez.- En medio de severas pérdidas económicas para los comerciantes del centro de Tuxtla Gutiérrez y la amenaza de la toma del Aeropuerto Internacional Ángel Albino Corzo para este lunes, los maestros cumplieron 52 días en paro de labores.
La "película" que tiene a miles de niños sin clases comenzó el 28 de agosto y ha tenido diversos capítulos como bloqueos carreteros, la frecuente toma de la Torre Chiapas (el edificio administrativo más importante del estado), la toma de más de 30 presidencias municipales y el saqueo de al menos dos ayuntamientos.
Quienes quizá han sufrido la peor parte son los comerciantes del centro de la capital del estado, pues el bloqueo comienza en la Cuarta Poniente y avanza por la Avenida Central hasta la Novena Oriente. Molestos, el viernes bajaron las cortinas de sus negocios para protestar y anunciaron que comenzó el despido de trabajadores.
El mismo viernes, el gobernador Manuel Velasco Coello, mediante un comunicado, hizo un llamado urgente al secretario de Educación, Emilio Chuayffet, para que voltee a ver a los maestros de Chiapas y haya algún tipo de negociación.
"No es mediante amenazas a los docentes como la Secretaría de Educación Pública, que encabeza Emilio Chuayfett Chemor, resolverá el conflicto derivado de la Reforma Educativa", dijo.
Solicitó al funcionario federal que "atienda y escuche los planteamientos del magisterio chiapaneco", quienes para este lunes han anunciado en su "agenda" la toma del Aeropuerto Internacional Ángel Albino Corzo, tal y como lo hicieron dos veces con el almacén principal de Pemex en Tuxtla Gutiérrez.
Velasco Coello dijo que es urgente que el Secretario de Educación muestre que existe voluntad para dialogar con el magisterio local y calificó como un error que la dependencia ignore al magisterio de Chiapas.
El gobierno de Chiapas ha sumado más de 40 mil sanciones económicas a los profesores en paro y ha enviado a unos mil 200 maestros sustitutos.
En los últimos días ha habido marchas a favor y en contra del magisterio por parte de padres de familia. Unos exigen el urgente regreso a las aulas y otros dicen apoyarlos.
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