Estos yucatecos quieren crecer hacia EU 'gracias' a la India

Aunque México todavía no es reconocido a nivel mundial como una potencia para el desarrollo de software, para estos empresarios yucatecos, este momento es una oportunidad para crecer y posicionarse a nivel internacional en esta materia.

Fundadores de DaCodes, empresa de Mérida especializada en el desarrollo de apps, Jorge Campos, Carlos Vela y Mauricio Moreno consideran que su empresa, de cuatro años de vida, tiene potencial para crecer hacia el extranjero, especialmente hacia Estados Unidos.

Ello gracias a una reciente experiencia de Vela en ese país. Asistente a la cumbre Forbes Under 30, en Boston, descubrió que las empresas de ese país necesitan acercar a sus desarrolladores, muchos de los cuales se encuentran al otro lado del mundo.

"En Estados Unidos, el desarrollo (de apps) es muy caro y ellos trabajan mucho con desarrollos que están en India, no están cómodos por el tema de la zona horaria, porque cuando los indios trabajan, en EU es de noche, y el tema de la comunicación es muy complicada.

"El tema de trabajar con empresas de México (tiene la ventaja de que) se da un poquito más el saber hablar inglés, saber comunicarse y la zona horaria es la misma", detalló Campos.

Actualmente, la empresa que comenzó desarrollando de apps para startups trabaja con grandes empresas como Telcel, Bepemsa y Decathlon, ya planea, además de ampliar sus fronteras, instalar una oficina comercial en México. Sin embargo, las labores de desarrollo las quieren dejar en Yucatán, "porque hay mucho talento, hay mejores oportunidades en el tema de la mano de obra", añadió.

Esta oportunidad se verá impulsada con la instalación de la Zona Económica Especial (ZEE) de Progreso, al norte de la capital yucateca, que estará enfocada en dar apoyo y facilidades a empresas del sector tecnológico.

"Hay mucho futuro acá de empresas grandes que pueden hacer un boom aquí del tema de tecnología que se puede volver como el de Guadalajara", agregó Campos.

Entre las ventajas que DaCodes vio para crecer en el mercado, destacan su especialización, pues a diferencia de empresas de desarrollo o venta de software, ellos mismos se definen como "especialistas en apps", de las cuales ya han desarrollado cerca de medio centenar.

Sin embargo, para el desarrollo del sector no basta con que se den facilidades o se instalen empresas desde el extranjero, sino que se tiene que combinar con el trabajo en conjunto tanto de las instituciones académicas, como las propias compañías, el gobierno y el interés de la sociedad.

"Las empresas más importantes del mundo no son aisladas, sino que salen de clusters. (...) Es esa interacción que hay entre los clusters lo que genera innovación, lo que genera desarrollo. Por ese lado, sí puede apoyar mucho que impulsen (la ZEE) en este lugar mientras no sea algo aislado.

"Mientras no sea que ahí como una cápsula que llegan las empresas 'gringas', se ponen y pues ahí está; si se ponen a capacitar, a interactuar en las escuelas, ahí va a pasar algo muy fuerte", comentó Moreno.

Como ejemplo, mencionó el caso de Google en Silicon Valley, donde la empresa tiene un convenio para la capacitación de personal en la Universidad de Stanford.

Otra de las ventajas que encuentran con la llegada de la ZEE es que habrá mayor desarrollo y capacitación de talento en la región, así como mayor atención desde el exterior. Sin embargo, también podrían enfrentar un problema.

"Lo que nos puede perjudicar es la cuestión del talento, que obviamente (las empresas que llegan) puedan ofrecer sueldos muy altos, y eso nos puede afectar a nosotros; en el tema de mercado, es bueno porque la gente voltea a ver hacia acá", comentó Campos.

En este escenario, la empresa se perfila no sólo para crecer hacia afuera, sino también para expandirse en su mercado inicial: las startups.

"Mezclamos mucho la parte de tecnología y emprendimiento. Dacodes tiene participación en varios proyectos que llevan un año, dos años, pero son proyectos exponenciales que en cinco, diez años, pueden dar el 'susto'", señaló Moreno.