He Dicho

'Defendiendo' al delantero mexicano

Esta especie de defensa del futbolista se ha derrumbado una y otra vez cuando los entrenadores del Tri regresan a dirigir a un equipo, escribe Miguel Gurwitz.

Alguna vez hemos escuchado, leído o dicho algo así como: "mira, es que soy yo y mi circunstancia". Es una frase del filosofo español Ortega y Gasset, pero si de plano nunca pasamos por tal lectura, establecer algo así como: "cada quien hace lo que le conviene" o "cada quien jala agua para su molino".

En sí, es una forma de justificar nuestros actos dependiendo la circunstancia que nos rodea.

Pues bien, escuchar a Ricardo Ferretti decir en la conferencia de prensa después de la derrota que "naturalmente hay que darles la oportunidad, Zaldívar, Martín, Pulido y estos jugadores que son los mexicanos que están ahí, apareciendo, hay que darles la oportunidad para que puedan llegar", es un gran ejemplo de ello.

Ricardo Ferretti hablando de las oportunidades para delanteros mexicanos jóvenes suena un tanto extraño, ya que basta revisar la lista de contrataciones en Tigres durante su gestión, y nos daremos cuenta que de lo que menos ha habido es precisamente eso, espacio para los delanteros jóvenes mexicanos, por lo mismo suena raro escuchar al Tuca establecer la idea, ya que no hay hechos que lo respalden.

Tigres se ha caracterizado por buscar más afuera que adentro, eso sí, en descargo de esta filosofía, su búsqueda es refinada y termina siendo efectiva. Nadie puede negar que es el equipo que mejor ha contratado en los últimos años y de los muy pocos que invierten mucho más de lo que gastan. En resumen, contratan jugadores que elevan el nivel de competencia en nuestra Liga, y nos guste o no, es su manera operar, y los resultados ahí están.

Ponerle el dedo encima a Tuca podría resultar un tanto injusto, ya que al final él está de paso; además, no es la primera ni la última vez que escuchemos esta, si no falsa, al menos muy débil creencia: Miguel Herrera, José Manuel de la Torre, Hugo Sánchez, Ricardo La Volpe y muchos más han caído en lo mismo.

Esta especie de defensa del futbolista, en específico, del delantero mexicano, se ha derrumbado una y otra vez cuando los entrenadores del Tri regresan a dirigir a un equipo.

Ahí es cuando nos damos cuenta que es sólo un pensamiento pasajero y convenenciero... que "cada quien jala agua para su molino", que "cada quien hace lo que le conviene" y que terminan con la justificación del "yo, y mi circunstancia".

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