Julio Madrazo

Productividad ocho veces menor

Invitado por el Aspen Institute México, la semana pasada estuvo en el Distrito Federal el Dr. Ricardo Hausmann del Centro de Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard. Durante la conferencia que dictó para responder a la pregunta de ¿por qué México no crece?, Hausmann pone el dedo en la yaga de varios problemas estructurales de nuestra política económica, con un ángulo ciertamente fresco y agudo.

Uno de ellos es la enorme diferencia que existe en México en términos de productividad por trabajador. Si bien a nivel nacional la productividad ha decrecido en los últimos 15 años, esto no ocurre en todo el país. Hay estados e industrias que tienen una muy alta productividad, lo cual explica su crecimiento económico y capacidad exportadora.

Sin embargo, resulta que Guerrero es el estado menos productivo del país, con una productividad por trabajador de apenas cinco mil 281 dólares anuales, similar a la de Honduras; Sinaloa tiene el doble, 10 mil 945 dólares al año de productividad por trabajador, similar a Jamaica; Guanajuato el doble que Sinaloa y equivalente a Malasia; y finalmente Nuevo León, el doble que Guanajuato y ocho veces más que Guerrero, de 42 mil dólares anuales, similar a la productividad de Korea. Es decir, tenemos estados muy distintos, con niveles de desarrollo de una diferencia abismal. ¡De ahí los grandes problemas de México! En todas las naciones hay diferencias entre zonas más desarrolladas y otras más rezagadas, pero no en la dimensión y del tamaño que se viven en México.

En un estado ocho veces menos productivo suceden atrocidades como las de Iguala. No es que Guerrero siempre ha sido violento; más bien siempre ha sido un lugar muy atrasado. Ambos datos son un serio llamado de atención al Estado mexicano. Las diferencias tan hondas que existen de desarrollo, distribución del ingreso, equidad y productividad, son producto del abandono casi total de zonas y poblaciones enteras.

Ahora que el gabinete del gobierno federal tiene como tarea atender Guerrero, deberán definir políticas públicas innovadoras y lograr que usted y yo algún día tengamos incentivos para vivir en Iguala. ¿Serán capaces?

Twitter: @julio_madrazo

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