La Nota Dura

Promesas del Pesupuesto

Javier Risco escribe que en el Presupuesto 2019 se deja ver, al menos en parte, la estrategia sobre las promesas que llevaron a López Obrador a la silla presidencial.

Hechos, no palabras. Más allá del discurso y la demagogia, más allá de los dichos en campaña o de los mensajes que salen a través de comunicación social o en conferencias de prensa matutina, una forma de saber cuáles serían realmente las prioridades del nuevo gobierno quedó escrito en el Presupuesto 2019 que fue entregado a la Cámara de Diputados este fin de semana, y que deja ver, al menos en parte, la estrategia sobre las miles de promesas que lo llevaron a la silla presidencial y que ahora deberá intentar cumplir.

Sí, sé que ese Presupuesto debe aún discutirse en el Congreso, que puede –y debe– tener ajustes y que se alimentará también con el que envían los demás poderes y organismos autónomos, pero esta entrega es el gasto que el presidente Andrés Manuel López Obrador cree que debe hacerse para comenzar su tan vendida cuarta transformación.

Pero ¿qué nos encontramos con una primera revisión al Presupuesto? De entrada, habría que subrayar la importancia de que ahora estemos todos más dispuestos a fiscalizar la propuesta presupuestal. Algunas de las cosas a resaltar ya las había adelantado el presidente en sus conferencias matutinas, como el incremento del presupuesto en la Secretaría del Trabajo, del Bienestar y de Energía. El incremento a las Fuerzas Armadas bajo el argumento de la formación de una Guardia Nacional, que aún no tiene marco legal pero que ya opera en algunas zonas del país, también ya estaba cantado. Esa estrategia de Andrés Manuel López Obrador de apagar/atizar fuegos que ve que se le encenderán…

En comparación con el PEF 2018, hay otras dependencias con incrementos significativos como la de Turismo, que gozará de 116 por ciento más; Desarrollo Agrario, que sube un 7.7 por ciento, y la SEP, con un ligero consentimiento del casi 3 por ciento. En cambio, llama la atención no las áreas consentidas ya anunciadas, sino las que reciben menos presupuesto y que por las prioridades anunciadas por el gobierno, no se explican sólo en el papel. Es en estas en las que tocará abundar los siguientes días para entender cómo, por ejemplo, si uno de los pilares de la cuarta transformación es el combate a la corrupción, la dependencia liderada por Irma Eréndira Sandoval tiene una disminución presupuestal del 27 por ciento.

O cómo es que su preocupación por el medio ambiente y el rescate de los recursos naturales del país se explica con el 32 por ciento de reducción al programa dedicado a ello y que es el área más castigada del Presupuesto 2019.

En su cuenta de Twitter, Leonardo Núñez, quien desde hace varios presupuestos se ha dedicado precisamente a darle seguimiento en cómo gasta nuestro dinero el gobierno más allá de lo que se aprobará en unas semanas, subrayó cosas importantes: no habrá un solo peso destinado al Programa de Apoyo para Fomentar el Fortalecimiento al Sector de Ahorro y Crédito Popular y Cooperativo; no habrá dinero en Sagarpa para el Programa de Fomento Ganadero, y el de Fomento a la Agricultura tuvo un tijeretazo del 82 por ciento.

En la SEP, el Programa de Inclusión Digital no tendrá recursos y los que están dedicados al fomento del inglés, el de inclusión, en deporte, educación para adultos e igualdad de género tendrán los principales recortes. Aún con lo grave que es el problema de salud en materia de obesidad, tendrá un recorte del 92 por ciento, y el fortalecimiento de salud estatal también quedó fuera. De los siete programas de la Secretaría de Cultura, seis sufrirán recortes y sólo se dará prioridad al de Protección de Patrimonio Cultural.

En la Secretaría del Bienestar se destinará 20 por ciento menos al programa de Prospera. Y en seguridad, aunque hay aumentos en las secretarías en general, en el detalle llama la atención disminuciones para la próxima Fiscalía General, para el área de centros de readaptación social, para la Policía Federal, para el Sistema Nacional de Seguridad Pública y para las áreas de Inteligencia en Seguridad.

Y es que los políticos hablan mucho, pero es el detalle de sus acciones y el cómo las implementan, las que realmente muestran sus intenciones y prioridades. Ya lo estamos viendo.

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