Contracorriente

Trump conduce a una recesión

Guillermo Knochenhauer dice que el presidente de EU ha puesto a Estados Unidos en graves problemas por la imposición de aranceles. ¿Cómo le afecta a México?

Trump está en graves problemas. Además de los de salud mental, la República Popular China no se amilana ante sus sanciones arancelarias y no sólo le responde con la misma moneda imponiendo aranceles a 106 productos estadounidenses, sino que le recuerda que el valor del dólar depende de su aceptación como dinero mundial.

Estados Unidos (EU) es un país que consume más de lo que produce y desde hace décadas paga la diferencia imprimiendo billetes.

El valor de esos dólares depende de que los países los sigan usando en las transacciones mercantiles y como reserva internacional, y lo han estado haciendo a pesar de que todo mundo sabe que circulan muchos más dólares que lo que valen la producción y los servicios estadounidenses.

El dólar sigue siendo la moneda de aceptación mundial porque a nadie le conviene que se deprecien y sobre todo, porque la diferencia entre el valor nominal de los dólares en circulación y el que representa la economía estadounidense, se compensa en gran parte con el valor del petróleo que se comercia internacionalmente y que se les paga a los exportadores con petrodólares.

No es un secreto que Saddam Hussein se convirtió en el abominable dictador de Iraq al anunciar que recibiría euros en pago por el petróleo. Su historia y la del desastre que siguió en su país son bien conocidas.

Pues resulta que China, que ya superó a EU como el primer importador mundial de petróleo, pretende empezar a pagar sus compras en yuanes, una estrategia que de resultar atractiva para numerosos países, acabaría con los privilegios de EU como emisor del dólar -dinero mundial- en poco tiempo.

El 26 de marzo se vendió en Shanghái la primera emisión contratos de futuros de petróleo en yuanes, respaldados en oro, como estuvo el dólar hasta 1971. La oferta por el equivalente a seis mil millones de dólares fue un éxito, se agotó.

Esos contratos son el primer paso de China para promover el uso de su moneda en el comercio global. Por lo pronto, Beijing tiene con qué desafiar a EU en Asia central y oriental otorgándoles préstamos a esos países en yuanes.

¿Cómo nos pega esto en México? En lo inmediato, Trump necesita distraer la atención pública de los riesgos en que ha metido a su país con China, para lo cual vuelve a amenazar y ofender a México desde su delirio obsesivo contra nuestro país; el martes dijo que intenta enviar a su Ejército a la frontera con México mientras se materializa su ocurrencia del muro, lo cual acentuará fricciones y violaciones a derechos humanos de mexicanos.

A mayor plazo nos pega porque al provocar a China, Trump le dio un doble golpe a EU y a las economías vinculadas: a) para seguir colocando sus bonos de deuda tendrá que aumentar las tasas de interés -lo que eleva los costos del servicio de la deuda y de las inversiones a nivel mundial-, lo cual se traduce en recesión, y b) la perspectiva de una guerra comercial internacional justo cuando el comercio se estaba recuperando de los baches de la larga depresión de 2007-2008.

Si la situación llevara a una nueva recesión, como todo indica que ocurrirá, Trump debería (y podría) ser destituido por inepto.

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