Coordenadas

Ya hay Tratado, ¿y ahora qué?

Aún falta para conocer los términos de este nuevo acuerdo para la región de Norteamérica, pero de momento podemos celebrar que ya se consiguió un tratado literal. Enrique Quintana explica por qué.

Se resolvió una incógnita que inquietó a inversionistas, empresarios y políticos desde hace muchos meses: ya hay un TLCAN comercial renegociado.

Formalmente fueron 410 días de negociación, es decir, un año, un mes y 15 días.

Sin embargo, desde que se conocieron los resultados de las elecciones en Estados Unidos, el 8 de noviembre de 2016, se prendieron las luces rojas y la incertidumbre comenzó, hace ya casi dos años.

Pero, aunque ya hay Tratado entre las tres naciones, cuyo texto habrá de conocerse con detalle en el curso de este lunes, sería un error pensar que pronto lo tendremos en acción a pesar de que su firma sea en 60 días, tentativamente el 29 de noviembre.

El próximo 6 de noviembre tendremos las elecciones de medio término en EU, que renovarán una tercera parte del Senado y la totalidad de la Cámara de Representantes.

El promedio de las encuestas, calculado por RealClearPolitics da una ventaja de 7.4 puntos a los demócratas en las elecciones del Congreso, alcanzando 48.9 puntos contra 41.5 puntos de los republicanos.

¿Qué implica que el Congreso pueda quedar en manos demócratas y que el TLCAN sea firmado por la administración republicana?

Que pudiera ocurrir lo que pasó en la renegociación del TLCAN original.

El 17 de diciembre de 1992, Jaime Serra, Carla Hills y Michael Wilson firmaron el Tratado que hoy sigue vigente.

Sin embargo, apenas unas semanas antes de firmar, Bush había perdido la contienda presidencial con Bill Clinton el 3 de noviembre de ese año. Así, el nuevo gobierno y nuevo Congreso demandaron modificaciones al Tratado firmado para poder ratificarlo.

El texto firmado por los tres países fue ratificado por la Cámara de Representantes hasta el 19 de noviembre de 1993, casi 11 meses después de su firma.

Así que, no es improbable que la ratificación del acuerdo pudiera ocurrir esta vez hasta bien entrado el 2019 y su vigencia bien podría llegar comenzando el 2020.

Con el texto que hoy se dará a conocer, no se eliminará de golpe toda la incertidumbre que existe, pero sí una gran parte de ella.

La tarea que habrá que emprender desde hoy mismo es su revisión minuciosa, pues en realidad sólo conocen la totalidad del texto los integrantes del equipo negociador.

Como en todos los tratados comerciales tan extensos y complejos, es probable que haya algunas sorpresas.

¿Qué efecto tendrá el acuerdo alcanzado sobre las inversiones y los mercados?

Creo que no va a ser de euforia, pues los mercados ya tenían descontado que al final habría acuerdo, pero por lo pronto, sí de confianza, pues ayer por la noche al operar en mercados asiáticos, el peso ya había ganado 12 centavos frente al dólar.

Para los gobiernos de México y Estados Unidos, sin embargo, el resultado será favorable.

Trump tratará de capitalizar el resultado para mejorar sus expectativas electorales.

En el caso del gobierno de Peña Nieto, habrá un reconocimiento al esfuerzo de dejar resuelto este factor de incertidumbre, en una firma que dará el cierre a su gobierno.

Y, en el caso de AMLO, le significará algo muy diferente comenzar con una incertidumbre resuelta que con una interrogante viva en el comienzo de la nueva administración.

Así que, aunque no sea motivo de fiesta, lo conseguido ayer, que conoceremos hoy con todos sus detalles, es sin ninguna duda, una buena noticia.

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