No trabas ni burocracia, inversión pública vía gasto corriente para aportar capital semilla a proyectos inmobiliarios con participación privada, fomentar el crecimiento horizontal y trasladar a nivel nacional el modelo de activación económica y social. Es el resumen la propuesta de Andrés Manuel López Obrador, candidato Presidencial de la Coalición Morena-PES-PT, el primero en responder con su propuesta, que busca duplicar la inversión inmobiliaria, a las empresas integradas a la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI).
Su mensaje destacó su relación con el sector en 2000 cuando fue jefe de gobierno de la hoy CDMX, la plataforma que permitiría avanzar 12 años en 6. El negocio inmobiliario recuerda su gestión, el tema más controvertido fue sin duda el establecimiento del Bando II, que restringió el desarrollo urbano en las 4 delegaciones centrales.
Una segunda propuesta generada desde una presentación que permitió visualizar desde una presentación interactiva, fue la de Ricardo Anaya de la Coalición PAN-PRD-MC.
En total 5 propuestas encaminadas a enfrentar la corrupción, simplificación administrativa, incrementar la inversión gubernamental en infraestructura, un área de atención a la inversión privada y una política de creación de metrópolis vía ciudades desde el gobierno federal.
Y finalmente, José Antonio Meade, candidato presidencial de la Coalición PRI-PVEM-PANAL buscó desmitificar la visión de México como un país en desarrollo, el mejoramiento del estado de derecho, la ley y el orden, la inseguridad y el fomento de un desarrollo urbano ordenado.
Sólo para 2030 el déficit de vivienda será de 10 millones. Por tanto, propuso la creación de ciudades inteligentes y destacó la participación de vehículos financieros como SERPIs, CKDes, FIBRAS y la propia banca comercial como promotores de muchos de los proyectos relevantes de inversión, en promedio creados uno cada 3 días en los últimos 6 años.
En el último año del actual sexenio, Salvador Daniel destacó el crecimiento de 21% de la inversión acumulada que llegó a 36 mil millones de dólares, que permitieron construir 65 millones de m2 y la creación de 260 mil empleos anuales.
La revisión de propuestas al final permitió observar lo que el negocio del real estate representa para las distintas fórmulas.
Adicional a la fuerte inercia política, donde también se escucharon propuestas de los contendientes al gobierno de la Ciudad de México, esta reunión hizo evidente la continuidad de proyectos de las 81 empresas que integran la organización.
Destacaron también los reconocimientos de los premios ADI 2018 al Parque La Mexicana, promovido por Grupo Danhos y Grupo COPRI, Miyana de Gigante Grupo Inmobiliario y finalmente el Proyecto Paseo 136 ubicado en Bucareli, de Quiero Casa.
En el ámbito de ingeniería se reconoció la trayectoria de Roberto Meli Piralla, partícipe de la elaboración del nuevo Reglamento de Construcción en la CDMX, que en su contenido medidas encaminadas a las estructuras resistentes a sismos.
Como ya lo comentamos, el toque internacional de los arquitectos Thom Mayne y Brandon Haw, además de la visión urbana global de Philipp Rode, éste último director ejecutivo de Estudios Urbanos de la London School of Economics.
Sin duda, el entorno y futuro del real estate encontrará a partir del proceso electoral, el nuevo camino del entorno en que basará su expansión.