Benito Solis

Trump puede iniciar una crisis económica global

Benito Solís plantea el escenario de una crisis económica y opina que México debe estar preparado.

El presidente Trump propone elevar los aranceles a las importaciones de acero y aluminio e imponer restricciones al comercio internacional, lo cual puede abrir la puerta a una nueva y grave crisis económica mundial, de la cual no parecen estar conscientes en su administración.

Un error muy parecido se cometió en aquel país a finales de la década de los 20, mismo que provocó la más grave recesión de los últimos siglos a nivel global. En 1928 el candidato republicano a la presidencia, Herbert Hoover, prometió durante su campaña imponer aranceles a las importaciones de productos agropecuarios e industriales, a fin de apoyar la reactivación de los respectivos sectores, así como la creación de empleos.

Al ganar las elecciones y obtener la mayoría en las dos cámaras legislativas, lo que rompió el equilibrio político, envió la correspondiente iniciativa de ley para elevar los aranceles.

En mayo de 1929 la Cámara de Representantes aprobó la versión que restringía el comercio internacional en espera de que la Cámara de Senadores aprobara la misma. Las bolsas de valores empezaron a tener sus ajustes a la baja y el 29 de octubre del mismo año se tuvo el crack de Nueva York, denominado el 'Jueves Negro', que siguió durante los siguientes días con el denominado 'Martes Negro'. Unos meses después (marzo de 1930) la Cámara de Senadores aprobó la llamada Ley Smoot-Hawley como respuesta de la presión de los votantes, a fin de "crear empleos y recuperar las producción", elevando los aranceles a las importaciones de diversos productos.

Diversos académicos y banqueros, industriales y empresarios le pidieron al presidente Hoover que vetara la ley por los graves efectos que puede tener en la economía estadounidense, a lo que se negó y entró en vigor esta ley. Como respuesta, los demás países tomaron represalias elevando también sus aranceles, todo lo que redujo de manera drástica el comercio global.

Se estima que el comercio internacional cayó 60 por ciento en los siguientes tres años y el desempleo pasó de 8.0 a 25 por ciento, el PIB cayó cerca de 30 por ciento y la producción industrial se redujo a la mitad en el mismo periodo. La economía recuperó su dinamismo durante la Segunda Guerra Mundial varios años después y al finalizar la misma se crean diversas instituciones para evitar que se repita una nueva crisis en el futuro. Entre las mismas están la Organización Internacional del Comercio, antecesora de la actual Organización Mundial del Comercio, misma que Trump ha atacado en fecha reciente y amenazado con destruir.

Las coincidencias entre lo que ocurrió en la década de los 20 y el momento actual son sorprendentes, relevantes y preocupantes. De desatarse una guerra comercial entre Estados Unidos y sus principales socios comerciales, en el actual entorno de sobrevaluación de los mercados bursátiles, podría darse un ajuste importante de los mismos. Hace unas semanas la Bolsa de Valores de Nueva York se redujo 10 por ciento sólo como resultado del incremento de algunas céntimas en la inflación, lo cual confirma su actual debilidad.

México debe prepararse para un escenario negativo en los siguientes meses, tanto en el aspecto económico como político. Subir los aranceles que cobra el gobierno mexicano a las importaciones como represalia a las medidas unilaterales que tome el gobierno estadounidense nos puede perjudicar más a nosotros en el mediano plazo que a ellos, al hacernos perder competitividad.

En los siguientes años se tomarán varias decisiones que tendrán gran impacto en el futuro de nuestro país. Habrá que ser muy cautelosos e inteligentes para aprovechar las oportunidades que aparecen y evitar los riesgos. Esperemos que la siguiente administración esté consciente del difícil entorno internacional actual.

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