Mis Finanzas

¿Cómo nos irá con López Obrador?

El triunfo arrollador de AMLO siembra la esperanza de que las promesas de campaña se cumplan y se vean reflejadas en el bolsillo de todos. ¿Será?

El panorama de los mexicanos es muy optimista, así lo deja ver el Índice de Confianza del Consumidor con una elevación sin precedentes después de las pasadas elecciones. Detrás de dicha expectativa, está el proceso democrático y un triunfo arrollador, que siembra la esperanza de que las promesas de campaña se cumplan y se vean reflejadas en el bolsillo de todos.

Sin embargo, debo señalar que la alegoría contrasta con los pronósticos del Banco de México y analistas expertos que prevén un futuro cercano complicado por el entorno proteccionista a nivel global, esto sin considerar la repercusión que genere la política económica del nuevo gobierno en las inversiones privadas.

Como resultado del optimismo del consumidor regularmente vienen decisiones de aumentar gasto y endeudamiento, lo cual sería contraproducente si la realidad económica se complica. Incluso puede quedar fuera de las posibilidades de López Obrador, porque hoy la actividad productiva interna está ligada al mercado global, que corre el riesgo de presentar un descalabro.

Dice el refrán popular "el camino del infierno está lleno de buenas intenciones" y a pesar de que las estrategias planteadas por la próxima administración sean con el mejor de los propósitos, las consecuencias podrían afectarnos en lo general o en lo particular.

Simplemente, habrá quienes sufran el recorte de personal y baja de sueldos del gobierno Federal o el cambio de ciudad por la descentralización. En definitiva, las finanzas de esas familias se verán dañadas y requerirán planeación para sobrellevar el impacto.

También hay efectos colaterales, pues la modificación de proyectos de gobierno hace que algunos proveedores pierdan sus contratos y ello incide en los pequeños negocios y el empleo.

Habrá que estar pendientes de la perspectiva de los grandes inversionistas que podrían detener los flujos de capital ante el golpe de timón de la política económica, por ejemplo por la incertidumbre que priva en el terreno del sector energético.

No se trata de tener una visión pesimista, sino de prudencia y aunque se perciba con optimismo el nuevo gobierno, demos oportunidad de que inicie su mandato y sepamos cuáles son las implicaciones de cada una de las resoluciones públicas.

Recordemos, las expectativas tienen que ver con nuestro dinero, porque detrás de ellas está la toma de decisión sobre el patrimonio. Cuidémoslo.

El tema da para más y en la siguiente entrega abordaré la importancia no sólo de las medidas específicas, sino de la manera en que se aplican.

Alberto Tovar

Alberto Tovar

Economista, especializado en negocios y finanzas personales; certificado como coach de vida y equipos. Actualmente es el Director Regional de la Zona Norte de El Financiero. Ofrece conferencias, consultoría y coaching a organizaciones diversas.

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