Nacional

Política de drogas no debe limitarse a apagar fuegos sino a evitar que se generen: Osorio Chong

El secretario de Gobernación dijo que el uso de la fuerza no es y ni será, el único eje de la política de drogas; agregó que a partir de políticas integrales es que se podrán generar condiciones para impulsar la reconstrucción del tejido social. 

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, afirmó que la política de drogas no puede limitarse a apagar fuegos, sino que debe propiciar que esos fuegos no se generen.

"Se trata de debatir la manera en que el Estado puede, a partir de políticas más integrales, generar condiciones que abonen a la reconstrucción del tejido social", dijo.

Al inaugurar el Cuarto Foro sobre el uso de la Mariguana: Seguridad Ciudadana, el responsable de la política interior del país destacó que "hoy en México, se implementa una política que va más allá de la sola persecución de delitos relacionados con la producción, tráfico o venta de drogas ilícitas. Una política que incluye un gran esfuerzo de prevención, y déjenme referirlo así, como nunca antes se había hecho en nuestro país".

Resaltó que "hemos transitado de una respuesta puramente de fuerza contra la delincuencia, a una política integral en la que el enfoque preventivo es uno de los pilares más importantes".

Acompañado por el gobernador del Jalisco, Aristóteles Sandoval y el subsecretario de Derechos Humanos, Roberto Campa, Osorio Chong manifestó que para el Gobierno de la República, el uso de la fuerza no es y nunca será, el único eje de la política de drogas

Indicó que la seguridad ciudadana comienza por generar ambientes propicios para el desarrollo individual, y la convivencia armónica de las personas.

"Esto es ir más allá de reaccionar ante delitos consumados, poniendo especial énfasis en disminuir los factores de riesgo que genera la violencia".

Apuntó que existen distintas etapas en el problema de las drogas, desde su siembra y producción, pasando por el transporte y la distribución, hasta llegar a la venta y el consumo, por lo que cada una de ellas tiene efectos distintos en materia de seguridad ciudadana.

"Si hablamos de consumo, por ejemplo, es clave atender la relación causa-efecto, porque los estudios muestran que sí el consumo de drogas tiende a ser alto entre quienes cometen delitos, pero no puede afirmarse, que la comisión de delito sea elevada entre quienes consumen drogas. En todo caso, este tipo de situaciones exige que el Estado brinde opciones especializadas a quienes más allá de haber cometido un delito menor, sufren de una adicción", dijo.

Subrayó que para el caso de la prevención social en estos tres años, el Gobierno de la República, destinó más de siete mil 700 millones de pesos a al Programa para la Prevención de la Violencia, actuando en 238 demarcaciones, donde habitan casi cinco millones de habitantes.

En contraste, la violencia que se origina por la acción del crimen organizado, demanda la acción decidida de las fuerzas de seguridad del Estado mexicano.

"Una labor que desde luego tiene que seguir dándose para mantener o recuperar la tranquilidad en ciertas partes del territorio nacional", dijo.

Osorio Chong manifestó que si algo han demostrado estos debates, es que no puede abordarse el problema de las drogas desde una sola perspectiva. No es solo salud o derechos humanos, y desde luego, no es solo seguridad.

"Se trata de un fenómeno complejo para orientar el diseño de respuestas efectivas para su atención, a partir de la evidencia, el análisis y la evaluación de lo que funciona y de lo que puede mejorarse".

Recordó que en unas semanas más se llevará a cabo el último debate en la Ciudad de México, que ha sido inédito porque "no se había atrevido nadie de manera formal, desde el gobierno, llamar a todos, a quienes tienen experiencia y a todos los ciudadanos a un debate de esta naturaleza y que ayude al gobierno a que las políticas públicas vengan del consenso de la ciudadanía.

También lee: