MORELIA, Michoacán.- El gabinete del gobernador de Michoacán tiene estrictamente prohibido hacer proselitismo a favor de algún partido o candidato, pues "no queremos que haya ilegitimidad en las elecciones por una mala acción del gobierno", aseguró Salvador Jara Guerrero.
El mandatario estatal manifestó que los recursos del erario público están absolutamente etiquetados, con el propósito de que no se apliquen de manera incorrecta en las etapas del proceso electoral, y advirtió de que si algún funcionario se atreve a involucrarse indebidamente se le aplicará todo el peso de la ley.
Jara Guerrero insinuó que el pacto de civilidad política inicialmente propuesto por él y secundado por el PAN en el estado, se cayó al señalar que no se necesita signar un acuerdo sino tener la voluntad de respetar la ley en materia electoral.
Todos los actores políticos del estado están obligados a respetar la ley, para que haya legitimidad en las elecciones locales de este año, en donde se renovará la gubernatura, las 113 presidencias municipales y las 40 diputaciones, agregó.
Más adelante, el gobernador michoacano instó tanto a los partidos políticos como a los candidatos a realizar campañas políticas de altura y a evite denostar a los adversarios a fin de generar un mejor clima en busca de elecciones pacíficas, tranquilas y libres.
Salvador Jara declaró que en el estado existen condiciones sociales y políticas para que se lleven a cabo los comicios del 7 de junio, y subrayó que los candidatos tienen la obligación de presentar sus propuestas con respeto al electorado.
Este jueves 12 de febrero, el gobernador se trasladará a Roma, Italia, en donde el 15 de este mismo mes el Papa Francisco ungirá como nuevo cardenal al arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda.
Al respecto, Salvador Jara declinó precisar el monto económico que tendrá que pagar el gobierno por el viaje, pero consideró que "su estancia será apenas de cuatro días y su comitiva será reducida".
Cabe recordar que el anterior gobernador Fausto Vallejo Figueroa acudió a Roma hace un par de años, para llevar al Vaticano dos nacimientos hechos por artesanos purépechas, los cuales fueron elogiados por el Papa Benedicto XVI.