MORELIA.- El secretario de Gobierno de Michoacán, Adrián López Solís, afirmó que el helicóptero de la Procuraduría de Justicia no fue derribado por un ataque directo del crimen organizado sino por una maniobra evasiva del piloto, ocasionando la muerte de cinco personas.
Y en tal sentido, López Solís agregó que el resultado del peritaje es lamentable, pero hay que aceptarlo, e hizo ver que en los operativos se está expuesto a este tipo de riesgos.
En entrevista con varios representantes de medios de comunicación, el funcionario estatal dijo que el helicóptero se encontraba en Cupuán del Río del municipio de La Huacana, porque se había detectado un campamento del crimen organizado.
Adrián López admitió que los acontecimientos del martes 7 de septiembre están relacionados con una tarea de seguridad y de combate a la delincuencia.
Cabe recordar que ese mismo día, Renato Sales, coordinador nacional de Seguridad, dio a conocer que los agresores habrían utilizado una Barret calibre 50 para atacar a la aeronave.
Por otra parte, la Dirección de Análisis de Accidentes e Incidentes de Aviación de la Dirección General de Aeronáutica Civil de la SCT informó que determinó que la perdida de control de la aeronave probablemente fue por mezcla de factor humano y falla mecánica.
Debido fundamentalmente a que la información de la Unidad de Control de Motor (ECU, Engine Control Unit) y de Memorias no volátiles, se perdieron por la acción del fuego.
Asimismo hay evidencias de que la aeronave entró trabajando al momento del impacto y el motor tiene daños que permiten su inspección, por lo cual se deberá enviar con el fabricante para confirmar el estado del mismo.