CIUDAD DE MÉXICO.- A la fecha, hay más de 100 solicitudes de extradición –vigentes– hechas por autoridades de Estados Unidos, a sus similares de México, para presentar a traficantes de droga ante las autoridades del país vecino. Muchos de los capos requeridos buscan a través del juicio de amparo evitar su traslado.
Los narcotraficantes han emprendido batallas legales, que en algunos casos, de nada han servido, pues al final sí fueron extraditados, y en otros simplemente han aplazado el proceso de entrega a la justicia estadounidense.
Uno de eso casos es el del recién fugado Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, quien mientras estuvo preso en el penal federal de máxima seguridad El Altiplano, tramitó cerca de 10 amparos, muchos contra la extradición.
Incluso, en uno de ellos, cuya sentencia publicó El Financiero en abril pasado, el líder del Cártel de Sinaloa, expresó abiertamente su miedo a la extradición a Estados Unidos, pues dijo, sería recluido en "cárceles secretas, destinadas a inferir abominables e infames torturas", e incluso sometido a la pena de muerte.
Otros casos son los de José de Jesús El Chango Méndez, o Arnoldo Rueda Medina, La Minsa, líderes y fundadores de La Familia Michoacana, quienes –a través del amparo– han alargado sus juicios de extradición y siguen sin definirse.
Éstos y otros capos, como Mario Cárdenas Guillén, líder del Cártel del Golfo o Teodoro García Simental, El Teo, se han beneficiado de la política bilateral asumida por el gobierno de Enrique Peña Nieto, que en su administración redujo –en más del 50 por ciento– el número de extradiciones a Estados Unidos.
Cifras oficiales muestran que la administración de Peña Nieto ha entregado en extradición a 138 personas, 10 en diciembre de 2012; 56 en 2013; 67 en 2014; y 5 entre enero y junio de 2015.
La mayoría de esos 138 extraditados no son líderes, sino sólo operadores de los cárteles. El capo de mayor rango extraditado por el gobierno de Enrique Peña Nieto es Alfredo Beltrán Leyva, El Mochomo, líder del Cártel Beltrán Leyva, quien fue trasladado el 15 de noviembre de 2014 a Estados Unidos.
El número de extraditados por la administración Peña Nieto, contrasta con lo ocurrido en el gobierno panista de Felipe Calderón, que entre el 1 de enero de 2010 y 30 de noviembre de 2012, extraditó a 302 sujetos. Entre ellos están: Osiel Cárdenas, líder del Cártel del Golfo y fundador de Los Zetas; o Vicente Zambada Niebla, El Vicentillo.