CUAUHTÉMOC.- Jason Fernando, el niño menonita de siete años de edad, que el pasado miércoles fue herido por una bala perdida al pasar cerca de un enfrentamiento entre dos grupos criminales, fue reportado fuera de peligro, tras ser sometido a una cirugía en un hospital de esta ciudad.
La intervención de paramédicos de la Cruz Roja, que tienen una estación a pocos kilómetros del lugar, permitieron brindarle una rápida atención y el posterior traslado a esta población.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 14:00 horas a la altura del campo 106, en la colonia Swift Current, a pocos metros de la periferia del poblado de Álvaro Obregón, conocido también como "Colonia Rubio", cuando el menor y otros once de sus compañeros, eran trasladados a sus respectivos domicilios en un vehículo escolar.
Segundos después de pasar por un retén ilegalmente colocado por un grupo delincuencial, integrantes del bando rival que llegaron al sitio, abrieron fuego de forma sorpresiva, lo que suscitó un intercambio de disparos que duró poco menos de diez minutos.
Una de las balas impactó la parte trasera del camión escolar y pegó en la espalda del infante que iba sentado en el asiento trasero, proyectil que le perforó el pulmón derecho.
Hasta esta tarde, el camión escolar que pertenece a la escuela menonita "La Esperanza", permanece detenido por la policía ministerial, para la aplicación de las respectivas pruebas periciales.
De acuerdo con el informe de la Fiscalía General del Estado (FGE), el retén fue instalado con la intención de robar vehículos de lujo, para posteriormente utilizarlos en sus posteriores actos delictivos.
Durante el lapso que permaneció dicho retén, los delincuentes recopilaron siete automóviles, la mayoría camionetas de reciente modelo, de los cuales, fueron encontradas solo cinco, en el operativo aire-tierra que implementaron las corporaciones policiacas, posterior a la balacera.
El operativo con cien efectivos, se extendió por al menos cuatro campos menonitas de la región, en los municipios de Cuauhtémoc, Riva Palacio y Bachíniva, pero no lograron el arresto de alguno de los responsables.