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En QRoo, el fraude impacta en los créditos personales

Entre enero y septiembre de 2018, Quintana Roo reportó 60.7 casos de fraude por cada 100 mil habitantes, lo que representó un 52 por ciento de incremento respecto al año anterior, según GLAC.

Entre enero y septiembre de 2018, Quintana Roo reportó 60.7 casos de fraude por cada 100 mil habitantes, lo que representó un 52 por ciento de incremento respecto al mismo periodo del año anterior, e igualó la tasa reportada en todo 2017.

De acuerdo con la medición de Seguridad con Bienestar del ranking nacional del Índice GLAC, esa entidad del sureste mexicano registró mil créditos personales vigentes entre enero y marzo de 2018, lo que representó 4.4 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior.

Lo anterior ubicó a Quintana Roo en el lugar 27 a nivel nacional en el ranking del indicador, mientras que entre las entidades con un peor desempeño destacaron Baja California Sur, con 78.6 casos de fraude por cada 100 mil habitantes y un promedio de 985 créditos personales por cada 10 mil adultos, así como Colima, con 139 casos de fraude y 1,056 créditos personales.

A nivel nacional, el Índice GLAC destacó que durante 2017 la correlación entre el fraude y los créditos personales fue de -0.25 (asociación baja), lo cual significa que en el resto de las entidades del país, la confianza de la banca comercial para ofrecer más créditos y la demanda de los consumidores, son impactadas por otros factores.

En cuanto a Quintana Roo, el estado registró su peor desempeño histórico en 2012, con 116 casos de fraude por cada 100 mil habitantes y 735 créditos personales por cada 10 mil adultos.

En 2016 reportó su mejor eficiencia, con 43 casos de fraude y 1,102 créditos, mientras que en 2017 la entidad registró un incremento en la variable de fraude, con 60 casos por cada 100 mil habitantes y otro marginal en el número de créditos personales otorgados con 1,040 por cada 10 mil adultos.

El informe puntualiza que el fraude es uno de los delitos que más afecta la relación entre las instituciones bancarias y las personas que solicitan recursos, independientemente si es para consumo o aprovechar alguna oportunidad personal de inversión.

Este ilícito, añade, "propicia una menor liquidez y un impacto negativo en el consumo, lo que afecta el desarrollo económico de una entidad".

Al respecto, el Índice GLAC subraya que la correlación histórica de los últimos seis años entre ambas variables en Quintana Roo fue de -0.81 (asociación alta), lo que indica que el aumento en la incidencia de este delito ha estado acompañado de una menor cantidad de créditos personales otorgados, lo que impacta negativamente la imagen de una entidad que vive mayormente del turismo internacional.

En este contexto, destacó que al cierre de agosto de este año, la inversión destinada para el otorgamiento de crédito hipotecario en Quintana Roo creció marginalmente en comparación con los primeros ocho meses del 2017, convirtiendo éste tipo de financiamiento en uno de los principales para la entidad.

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