El pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión reiteró su solicitud a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), a que demande al gobierno de los Estados Unidos "el respeto irrestricto de los derechos humanos de los menores migrantes no acompañados", y a que "se refuercen las medidas para la protección de víctimas de trata".
Se indicó que "el Instituto Nacional de Migración señala que, anualmente, son más de cuarenta mil los menores migrantes que son repatriados por las autoridades norteamericanas, y de éstos al menos 18 mil se encuentran solos".
En un segundo Punto de Acuerdo avalado en una semana, se señala también que "adicionalmente, en los últimos años se ha incrementado el número de niños, niñas y adolescentes que viaja solos, lo cual pone en riesgo su vida".
El documento refiere que existen tres principales razones para este fenómeno: la primera, que los menores buscan reunirse con sus padres y familiares al otro lado de la frontera; en segundo término, por mejorar su nivel de vida y, en tercer lugar, por encontrarse huyendo de una situación de explotación laboral o sexual.
Añade que el incremento de estos flujos migratorios ha conllevado, de manera intrínseca, el número de personas que trafican con los menores, lo cual pone en mayor riesgo su integridad física.
Por ello, considera que los Estados nacionales deberán tomar las medidas de prevención para que no se produzcan situaciones de trata de niños y niñas en su jurisdicción o que se puedan identificarse en el momento en que las víctimas intentarían ingresar.