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Concreto, 'la gota que derramó el vaso' para el socavón: CICEM.

A casi un mes de que un agujero se abriera agujero en el Paso Express de Cuernavaca, el Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Morelos presentó su dictamen, en el que aseguran que el error estuvo en tapar el problema de la tubería con concreto.

El Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Morelos dio a conocer este día su dictamen de lo ocurrido en el kilómetro 93+800 del Paso Exprés, en el que concluyó que fue un grave error el inyectar concreto "con el objeto de mantener el sustento de los muros de contención, sin concentrarse en el origen del problema que era volver a encauzar el flujo del agua por el interior de la alcantarilla".

El órgano que representa a alrededor de 200 ingenieros locales y que preside Alejandro Rosas López, advirtió previamente que el análisis fue realizado por 20 expertos sin haber cobrado un sólo centavo, que es autónomo, y que "no guarda relación con ningún otro dictamen emitido por cualquier otra entidad y también se realizó al margen de las acciones del gobierno".

Las conclusiones de este dictamen se determinaron técnicamente con base en la observación, muestreo, estudios y recopilación de testimonios, pero sin contar con el proyecto original que nunca les entregó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

Rosas López dio lectura a un documento en el que se establece que la tubería se dañó durante el proceso de construcción en la obra provocando falta de continuidad en los acoplamientos y desplazamientos en la alineación de la misma, además de que se identificaron tres eventos en los que se aplicó carga a la tubería y en la cual se provocaron los daños".

Según el escrito, para remediarlo se realizó vertido de concreto con el objeto de mantener el sustento de los muros de contención, sin concentrarse en el origen del problema.

Con el peso adicional del concreto se originó un colapso de la tubería al caer el concreto que había sido vertido inicialmente para dar sustento a la cimentación del muro, originando la salida del agua por las juntas de los tubos de la alcantarilla, generando erosión interna de los materiales del terraplén, terminando por arrastrar el sustento en la zapata del muro de contención además del propio terraplén ocasionando oquedades, según lo que leyó Alejandro Rosas.

"Con los trabajos de recuperación del terraplén que se efectuaron en octubre del 2016 durante el procedimiento constructivo de los muros de contención y la estructura del pavimento con la construcción del muro de contención, posterior a este daño de la tubería se presentó una obstrucción parcial de la tubería con basura y elementos de arrastre", comentó López.

Agrega que los diferentes eventos de flujo fuera del conducto de la alcantarilla crearon una galería de erosión del tamaño considerable que nunca se reforzó o estabilizó adecuadamente formando un espacio vacío con la lluvia de la noche del 11 de julio y la madrugada del 12 de julio "se formó un embalse con un tirante de 6.5 metros agua acumulada (sic), al no fluir libremente indujo el aumento en la presión interior de la alcantarilla generando la migración del flujo hacia el exterior en las zonas adyacentes lo que empleó el tamaño de la galería debido a las altas velocidades internas se generó un arrastre de material tan grande que provocó una pérdida generalizada del sustento en las estructuras y finalmente el colapso del terraplén en la zona subyacente del socavón".

El órgano colegiado señaló que otro factor importante fue que los muros de contención no se desplantaron sobre el terreno natural resistente.

"Una vez que este Colegio ha concluido el dictamen, nos unimos al reclamo de la sociedad de exigir a las autoridades deslindar responsabilidades", dijo para terminar Rosas López.

Y aunque los ingenieros locales aseguraron que no tienen ningún interés con este dictamen, sí pidieron que los tres niveles de gobierno los tome en cuenta para la planeación y ejecución de futuras obras.

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