Mundo

Trump vuelve a complicar política exterior de EU con tuits

Los tuits del presidente sobre Araba Saudita pueden enturbiar la situación internacional compleja y una de las relaciones más fundamentales para Estados Unidos.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a demostrar lo rápido que sus tuits pueden dejar atrás la planificación de la política exterior estadounidense al apoyar al rey y al príncipe heredero de Arabia Saudita por el arresto de decenas de funcionarios antes que el Departamento de Estado pudiese terminar de evaluar las medidas.

Trump había hablado sobre Arabia Saudita con su secretario de Estado, Rex Tillerson, cuando estuvieron juntos en Tokio el 5 y el 6 de noviembre, pero no hubo una consulta formal antes que tuiteara este martes por la mañana que el rey Salman y el príncipe heredero Mohammed Bin Salman "saben exactamente lo que están haciendo".

Un segundo tuit rezaba: "¡Algunos de esos a los que están tratando con dureza vienen 'ordeñando' su país hace años!".

Los tuits constituyen tan solo la más reciente ocasión en la que Trump fija la política exterior de Estados Unidos en 140 caracteres. En la práctica, le transmitieron al príncipe heredero el pleno apoyo del país a pesar de las serias dudas que persisten sobre el compromiso de Arabia Saudita con el Estado de Derecho y su capacidad de garantizar transacciones financieras.

"Que Estados Unidos apoye de muchas maneras una postura vista como muy polémica puede resultar problemático para la región", dijo Raihan Ismail, conferenciante asociado del Centre for Arab and Islamic Studies de la Australian National University en Canberra, en entrevista telefónica.

"La inestabilidad regional seguirá espantando a los inversores extranjeros. Se ve la administración de Trump como errática".

Reacción

Trump estaba reaccionando a la orden del rey Salman, anunciada el 4 de noviembre, de detener a 11 príncipes, cuatro ministros y decenas de exministros y empresarios, entre ellos el príncipe Alwaleed bin Talal, uno de los hombres más ricos del mundo, como parte de una campaña anticorrupción encabezada por el príncipe heredero.

La medida reforzó versiones de que el rey estaba quitando los obstáculos que quedaban para que su hijo, el príncipe heredero, accediera al trono.

Una vez más, los tuits de Trump amenazan con enturbiar una situación internacional compleja y una de las relaciones más fundamentales para Estados Unidos, y podrían envalentonar al príncipe heredero en un momento en el que algunos de los funcionarios de la administración temen que esté avanzando demasiado rápido.

Por ejemplo, Estados Unidos está contento con gran parte de lo que el joven príncipe heredero quiere hacer, como su deseo de alejarse del radicalismo islámico, su orden de permitir que las mujeres manejen coches y Vision 2030, su plan de reformas.

Al mismo tiempo, a la administración la inquietan otras políticas, como la prolongada campaña militar en Yemen, coronada por la decisión de cerrar el acceso a Yemen por tierra, mar y aire a todos menos los equipos de ayuda y rescate, tomada el 6 de noviembre.

Sin embargo, algunos expertos externos se mostraron escépticos respecto a la posibilidad de que el tuit de Trump realmente moldee la política exterior, pese a toda la confusión que podría causar. James Dorsey, que estudia a Arabia Saudita como investigador sénior de la S. Rajaratnam School of International Studies de Singapur, mencionó casos anteriores, como el de Qatar, donde se permitió que Tillerson emprendiese una política distinta.

"Me parece que los antecedentes demuestran que los tuits de Trump no necesariamente fijan la política", dijo.

 
   

También lee: