SAO PAULO.- Los trabajadores del metro de Sao Paulo descartaron una nueva huelga y prometieron que trabajarán normalmente el jueves, día de la inauguración del Mundial de fútbol en el estadio Arena Corinthians, borrando los temores de una paralización en el medio de transporte.
Sin embargo, los miembros decidieron en una asamblea realizada el miércoles manifestarse en día de la inauguración mundialista en busca del reintegro de los funcionarios despedidos durante la huelga de cinco días que terminó en la noche del lunes.
Los trabajadores estudian realizar manifestaciones diarias, simultáneas a sus negociaciones con el gobierno estatal.
La paralización que comenzó la semana pasada provocó enormes trastornos en la ciudad, además de grandes embotellamientos.
Una nueva huelga el jueves complicaría el acceso al estadio Arena Corinthians, al que los hinchas acceden principalmente mediante la Línea Roja del Metro, que une al este y oeste de la ciudad.
En una movilización separada, el sindicato municipal de trabajadores de la aviación de Río de Janeiro (Simarj) decidió realizar una huelga en los aeropuertos Santos Dumont, Galeão y Jacarepaguá a partir de las cero horas del jueves, anunció el miércoles la agrupación.
El sindicato, vinculado a Força Sindical, dijo que la huelga fue convocada después de "nueve meses de intensas negociaciones y debido a la intransigencia de los sindicatos de los empleadores".
Los miembros del sindicato exigen a las empresas aéreas un reajuste salarial real y un abono por el Mundial.
Brasil disputará el partido inaugural frente a Croacia a las 17.00 hora local (2000 GMT).