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Tokio.- Corea del Sur descartó por el momento la celebración de una cumbre intercoreana, puesto que las condiciones aún no están listas para tal reunión, dijo hoy el ministro de Unificación de Seúl, Ryoo Kihl-jae.
Corea del Norte cambió a últimas fechas de una postura belicosa a una abierta al diálogo, en donde acordaron reabrir el complejo Industrial de Kaesong, suspendido desde principios de abril, en medio de las crecientes tensiones provocadas por la prueba nuclear norcoreana en febrero.
La última cumbre entre las dos Coreas se celebró en Pyongyang en octubre de 2007, entre el fallecido presidente surcoreano, Roh Moo-hyun, y el difunto líder norcoreano, Kim Jong-il.
Como parte de los recientes acercamientos entre las dos Coreas, el 14 de agosto acordaron reabrir el complejo de Kaesong, cuyas operaciones fueron suspendidas desde principios de abril, después de que el Norte retirara a la totalidad de sus 53 mil trabajadores de las más de 120 fábricas operadas allí por las empresas surcoreanas, en protesta por los ejercicios militares anuales entre Seúl y Estados Unidos.
Otra medida acordada entre las dos Coreas es la de celebrar, del 25 al 30 de septiembre, las reuniones para las familias separadas por la Guerra de Corea de 1950-1953.
El ministro de Unificación también dijo que Seúl no levantará las sanciones contra Pyongyang hasta que el Norte adopte medidas para asumir la responsabilidad por el hundimiento de un buque surcoreano en 2010, destacó la agencia Yonhap.
Ryoo indicó a una televisión local que "para que una reunión cumbre sea productiva, las condiciones deben primero estar listas a un grado considerable". "Seúl no considera en estos momentos una cumbre que pueda resolver todos los asuntos entre las dos Coreas en un marco amplio", agregó.
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