Mundo

Disputa por Gibraltar amenaza alianza de Reino Unido con España

Reino Unido se encuentra en una disputa en asuntos como el de Gibraltar, un tema que el país británico creía resuelto; sin embargo, por éste las conversaciones próximas del Brexit podrían ser desviadas.

La esperanza de Theresa May de que España pudiera ser un aliado en sus negociaciones del Brexit estaba en peligro después de que una disputa sobre el estatus de Gibraltar escaló al punto en que un alto cargo de su partido sugirió que la primera ministra estaría dispuesta a ir a la guerra por el territorio.

Michael Howard, quien encabezó el Partido Conservador de 2003 a 2005, hizo una comparación entre la encendida disputa con España por Gibraltar y la Guerra de las Malvinas de 1982 entre el Reino Unido y Argentina. Repitió la amenaza velada en entrevistas posteriores.

"No veo ningún daño en recordarles qué clase de pueblo somos", dijo Howard a la cadena Channel 4 el domingo.

La acalorada retórica, cuatro días después de que May diera inicio a dos años de conversaciones sobre el Brexit, fue una muestra del minado campo diplomático que el Reino Unido tendrá que negociar mientras se dispone a separarse de la Unión Europea y establecer una nueva relación con su mayor mercado.

El primer indicio de problemas surgió el viernes, cuando se supo que el presidente de la UE, Donald Tusk, había dado a España poder de veto a la aplicación del acuerdo del Brexit sobre Gibraltar, territorio de una superficie inferior a ocho kilómetros cuadrados en el extremo sur de España, que ha sido controlado por el Reino Unido desde 1713.

La medida causó consternación en el Reino Unido y en Gibraltar, porque ministros españoles han sugerido que buscarán una soberanía conjunta del Peñón. El domingo, el ministro principal del territorio, Fabián Picardo, habló con May para buscar garantías de que los intereses de Gibraltar estarían protegidos.

Si bien May, según su gabinete, usó la conversación telefónica para reiterar la postura del Reino Unido de que el estatus de Gibraltar no es materia de negociación, otros políticos tuvieron un discurso menos moderado.

"Hace treinta y cinco años esta semana, otra primera ministra mujer envió un equipo al otro lado del mundo para defender la libertad de otro pequeño grupo de británicos contra otro país de habla hispana", dijo Howard a Sky News. "Estoy absolutamente seguro de que nuestra actual primera ministra mostrará la misma resolución de apoyar al pueblo de Gibraltar".

Tim Farron, líder del Partido Liberal Demócrata de oposición, se expresó con dureza. "Es increíble que a la semana de activar el artículo 50 haya conservadores que ya estén discutiendo posibles guerras con nuestros vecinos europeos", dijo en una declaración por correo electrónico.

AMENAZA A LA PAZ


Lejos de los estudios de televisión, una guerra británica con España sigue siendo improbable, pero la disputa muestra el peligro de que las conversaciones próximas del Brexit sean desviadas por cuestiones que se habían considerado resueltas. En particular, la posibilidad de restaurar la frontera entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda es vista por muchos como una amenaza real para la paz allí.

Y las acaloradas discusiones con España hacen menos probable que el país desempeñe el papel amistoso en las conversaciones que el Reino Unido había esperado que pudiera tener. Los dos países tienen profundas relaciones comerciales y de turismo, así como un número grande de ciudadanos de uno y otro país entre sus residentes.

Eso hace que una solución rápida del asunto de Gibraltar interese al Reino Unido. Pero para la fortaleza política de May, no puede implicar nada que parezca una concesión.

"Estamos muy claros de que no puede haber un cambio en el estatus y la soberanía de Gibraltar a menos que el pueblo de Gibraltar lo acepte, y no lo hacen", dijo el domingo el secretario de Defensa, Michael Fallon, en el programa de Andrew Marr por la BBC. Los propios parlamentarios del territorio serán "partícipes de la totalidad" de las conversaciones, dijo.

:

También lee: