Miles de personas marcharon hacia el Parlamento en Londres este sábado para demandar que el gobierno británico retire su invitación para una visita de estado del presidente estadounidense Donald Trump.
Las críticas a la primera ministra Theresa May han aumentado desde su visita a Washington el mes pasado para reunirse con Trump, cuando confirmó planes para que el mandatario visite Gran Bretaña en el verano.
La protesta de este sábado en la capital británica se alargó tres kilómetros, desde la embajada estadounidense hasta la sede del Parlamento. Los miles de manifestantes coreaban "Vergüenza, Theresa May!".
Se espera que los legisladores debatan el plan de invitar a Trump. Una petición en internet para que May rescinda la invitación tiene un amplio respaldo, pero la premier insiste en que Trump es bienvenido.
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