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Ésta es mi experiencia como periodista en Corea del Norte​

Más de 130 periodistas extranjeros viajaron al país para cubrir el congreso del partido gobernante. Uno de ellos, de Bloomberg, nos cuenta su experiencia con los llamados 'cuidadores'.

Al menos 130 periodistas extranjeros viajaron a Pyongyang para cubrir el primer congreso del partido gobernante norcoreano en 36 años.

Para los medios, los cuidadores son una presencia constante. Ellos traducen, les dicen a los periodistas dónde pueden o no pueden ir, e imparten la línea oficial sobre todo, desde las relaciones con Estados Unidos hasta la forma apropiada de aludir a líderes del régimen.

Algunas de estas recomendaciones son bastante irritantes:

Cómo llamar al país

Corea del Norte no es Corea del Norte. Es, más bien, la República Democrática Popular de Corea del Norte (Corea RDP o RDPCN). Por completo desubicada es la expresión "el reino ermitaño", los cuidadores dicen que la frase les resulta profundamente insultante.

A Corea del Sur, con los cuales tuvieron una guerra en la década de los 50s y que terminó con una incomoda tregua, es conocida como Corea del sur, con la "s" en minúscula.

He aquí una frase de un artículo de periódico sobre el Ejército Popular de Corea: 'Es claro para todos que los soldados de Corea del sur nunca pueden dormir bien, siempre preocupados porque el EPC los castigará con una lluvia de fuego.'

Cómo dirigirse a los líderes

Corea del Norte tiene un gobierno, pero solo tres personas importan realmente, y dos de ellas han muerto. Kim Il Sung, que fundó el país y murió en 1994, a menudo es llamado 'presidente eterno' o 'gran general'. Su hijo Kim Jong Il es 'presidente' o 'querido líder'. Kim Jong Un, que asumió el poder al morir su padre a fines de 2011, puede ser llamado 'líder supremo' o 'querido respetado'.

A un periodista que se le olvido agregarle el título fue rápidamente amonestado: "Por favor, recuerde anteponer el 'líder'. Siempre recuerde el 'líder'".

Los prendedores de Kim

Todos los norcoreanos usan un prendedor sobre el lado izquierdo del pecho con la cara de Kim Il Sung o Kim Jong Il – o ambas–.

Los extranjeros no pueden comprar prendedores.

El más común es una brillante bandera roja con los retratos de ambos líderes. Pero no hay que llamarlos prendedores ni pins. Estas palabras socavan su importancia. Un cuidador los clasificó tras consultar un software de traducción en su teléfono, como 'insignias'.

Estados Unidos

Mencionar a Estados Unidos puede dar como resultado una larga lección. No hay tal cosa como relaciones con Estados Unidos, solo "la hostil política de Estados Unidos".

Al preguntarle a sobre este tema a Om Mynong Chin, un trabajador de 57 años de una fábrica de baterías, dijo:' Si el gobierno de los Estados Unidos detiene su política hostil en contra de nuestro país, con el tiempo las relaciones podrían mejorar'. Los cuidadores rápidamente respaldaron su respuesta.

Preguntas difíciles

La respuesta más frecuente de un cuidador a una pregunta es: 'Esa es una pregunta difícil'. Entre las preguntas difíciles está: '¿Por qué no se me permite salir solo del hotel?' Y su respuesta es: 'Los malos sentimientos de la gente con respecto a Estados Unidos están exacerbados y tal vez no pueda protegerte'.

Otra pregunta difícil es: '¿Porque la tasas de cambio oficial es de 100 wons por dólar, mientras que en el mercado de cambios está en ocho mil wons por dólar?, su respuesta es: 'Mañana te lo digo'.

Cigarros

Por más que exaltan las políticas de autosuficiencia de su país y la calidad de los bienes fabricados en él, algunos cuidadores tienen gustos exigentes.

Los periodistas a quienes les dijeron que llevaron cigarrillos de regalo a sus cuidadores cometieron el error de comprar Marlboro Reds fabricados en China. "Estos son cigarrillos chinos libres de impuestos", dijo un cuidador rechazándolos.

Ellos solo aceptan Marlboros hechos en Estados Unidos o México.

Cuando un cuidador no es un cuidador

'La tarea del cuidador es esconder la embarazosa cara interna de la sociedad norcoreana ante los ojos de los forasteros', dijo Ahn Chan Il, un desertor norcoreano que encabeza el Instituto Mundial para Estudios sobre Corea del Norte, con sede en Seúl.

"Hay tanto que esconder de Corea del Norte. Es por eso que atrás de la ostentosa etiqueta de 'guías', se busca que los extranjeros fotografíen solo lo que el gobierno de Corea del Norte quiere que se fotografíe", agregó.

Y el equipo que recibió a los periodistas en el aeropuerto ni siquiera quiso que los llamaran cuidadores. 'Yo no te estoy cuidando', dijo uno. 'Nosotros los guiamos. Por favor, llámame guía'.

Con la colaboración de Sam Kim. Reportero en la nota original: Nicholas Wadhams.

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