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Roma.- Los jueces del Tribunal de Milán que procesan al ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi por fraude fiscal señalaron que no hay impedimento para que comparezca en la audiencia de hoy, pese a que fue hospitalizado por conjuntivitis.
Berlusconi fue sometido a una revisión en el hospital San Raffaele de Milán, donde fue internado la víspera, por lo que no asistió a la audiencia del llamado proceso Ruby, en el que es imputado de concusión y prostitución de menor, en la que los fiscales debían pedir la condena.
La defensa de Il Cavaliere había argumentado que debido a razones de salud tampoco podría presentarse este sábado a una audiencia del proceso de apelación por fraude fiscal en la compra-venta de derechos televisivos de su empresa Mediaset.
Ese juicio se encuentra en su fase final y se espera que la sentencia se conozca este mes.
En octubre pasado, Berlusconi ya fue condenado en primer grado por ese delito a cuatro años de cárcel y a cinco de interdicción (prohibición) para ocupar cargos públicos.
También se prevé que este mes sea dictada la sentencia del proceso Ruby, mientras el jueves pasado fue condenado a un año de cárcel por revelación de secreto de oficio, luego que un diario de su propiedad publicó en 2005 "escuchas" telefónicas bajo secreto de instrucción.
Tras su ausencia en la audiencia del viernes, los jueces ordenaron una revisión médica al imputado con el objeto de conocer si verdaderamente existía un "impedimento legítimo" para que asistiera a la cita judicial de este sábado.
Los propios magistrados determinaron que "no subsiste ningún impedimento", luego de que dos médicos inspectores sometieron a Berlusconi a una revisión, por lo que el juicio pudo continuar.
La defensa del ex primer ministro había dicho que permanecería hospitalizado hasta el lunes, lo que también impediría su presencia en la audiencia del proceso Ruby pospuesta para ese día.
Tras conocerse este sábado que Il Cavaliere está en condiciones de asistir a los procesos, su principal abogado, Niccolo Ghedini denunció que "se quiere llegar a la sentencia en tiempos muy breves".
Además, dijo estar seguro de que los jueces de la segunda sección penal del tribunal de apelación condenarán a Berlusconi por fraude fiscal, pero manifestó su esperanza de que pueda ser absuelto en el tercer y último grado de juicio, el de la Corte Suprema.
Según la prensa, la sentencia definitiva en el caso de fraude fiscal se producirá a finales de 2013 o principios de 2014, pocos meses antes de que prescriba el delito imputado a Il Cavaliere.
El principal efecto para el ex jefe de gobierno sería la "interdicción" para ocupar puestos públicos, con lo que su carrera política quedaría enterrada definitivamente.
El problema no serán la o las condenas carcelarias, pues también se podría beneficiar del indulto y del hecho de que a sus 76 años de edad goza de una ley que excluye de la prisión a quien tiene más de 70 años.
Según el diario La Repubblica, la "interdicción" para ocupar puestos públicos significaría "el fin de la carrera de líder" de Berlusconi, quien en 1994, cuando ya era magnate de los medios de comunicación, se lanzó a la política.
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