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Kelly presenta oficina de atención a víctimas de inmigrantes criminales

El Departamento de Seguridad creó una línea telefónica para canalizar a las víctimas a los servicios necesarios; la iniciativa forma parte de la orden ejecutiva presentada en enero pasado.

El secretario de Seguridad de Estados Unidos, John Kelly,  anunció el lanzamiento de la Oficina Atención a Víctimas de Inmigrantes Criminales de los Estados Unidos (VOICE por sus siglas en inglés) y que ayudará a las víctimas de delitos cometidos por inmigrantes indocumentados. 

"Todos los crímenes son terribles, pero estas víctimas son únicas y —con demasiada frecuencia— ignoradas... Son víctimas de crímenes que nunca debieron haber tenido lugar, porque las personas que los victimizaron a menudo no deberían haber estado en el país, en primer lugar", señaló en un comunicado.

El Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) creó VOICE en respuesta a la orden ejecutiva Mejorando la seguridad pública en el interior de los Estados Unidos, que el presidente Donald Trump dirigió al Departamento de Seguridad para brindara asistencia a las víctimas de inmigrantes indocumentados, de manera que tengan una "voz" para denunciar los crímenes de los que han sido objeto.

Para ello presentaron un número telefónico (1-855-48-VOICE o 1-855-488-6423) al que las víctimas pueden llamar para obtener información; cuenta con la asistencia de 27 especialistas, que se encargarán de dirigir a los afectados a los servicios necesarios para su rehabilitación.

Asimismo, permitirá a las familias afectadas recibir actualizaciones sobre el desarrollo del proceso judicial contra los indocumentados acusados de un crimen.

"Este enfoque permite a la oficina proporcionar servicios inmediatos a las víctimas, pero también servirá a la agencia para recopilar métricas e información para determinar las necesidades adicionales para atender mejor a las familias", señaló Kelly.

De acuerdo con el ICE, los agentes han tomado los datos de entre 450 y 500 personas afectadas por crímenes de inmigrantes en los últimos diez años, y se les informó sobre el proceso que llevan sus agresores.

El presidente de Estados Unidos desde su campaña electoral habló sobre la inmigración como un factor del incremento de la criminalidad procedente del narcotráfico y de las pandillas como la Mara Salvatrucha (MS-13).

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