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Irán no es el único dolor de cabeza sobre actividad nuclear: ONU


 
Reuters
 
Viena- Irán puede ser el principal dolor de cabeza para el organismo de control nuclear de la ONU, pero no es el único país que paraliza los pedidos de información vinculada con temas atómicos, sugiere un nuevo reporte de la IAEA.

Encargado de prevenir la expansión de bombas nucleares en el mundo, la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, por su sigla en inglés) de la ONU inspecciona reactores y sitios relacionados en todo el mundo para asegurarse de que material fisible sensible no sea desviado hacia fines militares.

En 2012, varios estados "no proveyeron cooperación suficiente para clarificar o resolver preguntas de la agencia", dijo el reporte anual de la IAEA sobre la implementación de salvaguardas nucleares, que fue discutido en una reunión de su junta de 35 países esta semana.

Para 71 de los 159 estados miembros, la IAEA "no pudo obtener respuestas oportunas a pedidos de la agencia para aclaraciones o información de salvaguardas relevantes", agregó, sin identificarlos.

El experto nuclear Mark Hibbs dijo que no creía que fuera una cuestión de violaciones graves de las reglas de salvaguardas de la IAEA o que alguno de estos países estuviera involucrado en actividades nucleares encubiertas con potenciales intenciones militares.

"Pero los estados están siempre intentando ver de qué pueden librarse" al llevar adelante actividades vinculadas con temas atómicos sin inspecciones intrusivas y burocracia agregada, dijo Hibbs, del grupo de estudio Carnegie Endowment.

Varios países no dieron información de diseño sobre instalaciones nucleares o notificación anticipada de transferencias de material nuclear, indicó el reporte de la IAEA.

Expertos en proliferación dijeron que en términos de gravedad, esos casos no deberían compararse con Irán, del que Occidente sospecha que busca la capacidad para fabricar armas nucleares.

Teherán dice que su programa nuclear es un proyecto enteramente pacífico para generar electricidad.

El enviado de Estados Unidos a la IAEA, Joseph Macmanus, acusó a Irán en la reunión de esta semana de "ocultar información repetidamente" a la agencia de la ONU con sede en Viena y de un "patrón de no cumplimiento y no cooperación".

Contrariamente a las demandas de la ONU, el reporte de la IAEA dijo que Irán no "suspendió (el año pasado) sus actividades vinculadas con el enriquecimiento, ni suspendió sus actividades relacionadas a agua pesada ni atendió las serias preocupaciones de la agencia sobre las posibles dimensiones militares" de su programa nuclear.

El uranio enriquecido puede alimentar plantas de energía nuclear, que Irán dice que es su única intención, pero también puede proveer material nuclear para una bomba si es enriquecido a un nivel elevado, que Occidente teme que sea el objetivo último del Estado islámico.
 

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